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I mbelloni: Pachakuti IX

ciencia mántica, y la idea de las 4 substancias elementales,

o Elementa, o

~totxct:a:

TIERRA, AIRE, FUEGO

AGUA,

que se conectan íntimamente con los conceptos de colores,

puntos cardinales, influjo maligno o benigno, Edades y ex–

terminios.

Señálanse especialmente el cap. II de esa Memoria, que

trata en el

1las Edades-colores, en el2las Edades-elementos,

etc.; el cap. III que ilustra en el

1 el sentido de perfeccio–

namiento progresivo, en el 2 los alimentos de Edad, etc.,

y el cap. IV que examina en el

1 el concepto de castigo,

pecado y decadencia que acompaña el final de cada ciclo,

en el 2 los exterminios·y en el 3 la serie canónica de las cala–

midades. Hay que advertir que la teórica de las 4 Edades

del Mundo se estudia en esa Memoria en sus formas mexi–

canas y mayas, que por representar una formulación com–

pleta y rica en desarrollos rituales, son las más adecuadas

para la comprensión del fenómeno general, al que no tenemos

obstáculo en calificar como el más importante y vistoso pro–

ducto mental del estado de cultura que precedió inmediata–

mente a los tiempos históricos. Superfluo es declarar que,

dentro del cuadro de conjunto y de la identidad de la intui–

ción, se presentan desarrollos variables y realizaciones más

o menos conspicuas en cada uno de los pueblos arriba refe–

ridos, sin excluir peculiaridades formales características, p. ej.,

del pueblo Chibcha, del Guatemalteco, del Peruano, etc. A

esta última clase pertenecen, p. ej., las articulaciones de se–

gundo grado con que la cultura del Perú ha dividido la du–

ración de una Edad, o Sol; sobre ella hemos de tratar cuanto

antes para analizar el valor de los Pachakuti 'intermedios'.

"El resorte - decíamos - que ha permitido, a estos

pueblos de cultura relativamente elevada, organizar el con–

cepto del tiempo en un aparato de rigurosa construcción,

consiste en la idea de las Edades del Mundo. Representan

éstas unos cuantos períodos de duración ·convencional, pero