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1

,

122

DICCION~RIO

FOLKLORICO DEL PERU

En efecto: los cajamarquinos son tan estupendos donan–

tes de gatos que, según es fama en Trujillo,

fabri~an

cristos

¡de alfeñique!. . . . . . les ponen una capa de plbmba.gina, los

sumergen en el baño electrolítico

y

al cabo de un rato, los re–

tiran convertidos en cristos

de

metal

más

herm0~c>S

QUe

lo~

importados de Italia.

Otra de las especialidades cajamarquiuas.

~s

la c.onf"c–

ción de

jatos

de totora forrada con tiritas de buen cuero,

y

étdornados con barrilitos de plata

de la que mandó

la

gata·.

..

Pero en lo que los cajamarquinos descuellan a setent:t

codos de altura, es en la confección de objetos de dos u tres

mil años de antiguedad, principalmente huacos. ·

Los pulperos de Trujillo, cuando reciben una moneda

falsa, la arrojan al medio de la calle, y dicen:-¡

Eso es cristo

4e alfeñiqt(e/- .

.....

Y pon extensión, en esa

duda~,

a to-

do lo que es falso-inclusive la

ge,nt~se

le llama

cristo de

alfeñique.

·

ESO ES LLEVAR

TUN~S

A JESUS.-Jesús es un

lindo pueblecito, que; se encuentra a

cua~tro

leguas escasas de

la ciudad

de

Cajamavca.

·

En la campiña de Jesús, se produce de toao y todo se

produce muy bien: el trigo, el maíz, la cebada, los ollucos,

las papas, y las hortalizas de Jesús, son incomparables!. Tam–

bién es incomparable, por la forma en que se prestnta,

el

pa–

ludismo de Jesús al que lvs naturaleE de ese lugar, llaman

chiri-chiri.

Pero lo que ha dado más fatna a Jesús, lo que consti–

tituye su más legítimo orgullo, es la variedad y hermosura de

sus tunas.

·

¡Qué colores de tpnas! Verde ·Cristalino, amarillo gual-

da, púrpura cardenalicio ..... .

Y qué dulcísimo y helado jarabe el que encierran

~sas

· ánforas ele esmeralda, ele topacio, de rubí! ...

En cuanto a la abundancia de tunales, es tan grande que

se encuentran tunas hasta en los tejados de las casas.

No en vano, el ilustre ·Cajamarquino doctor don Rafael