'
CARLOS CAMINO CALDÉRON
117
piuranos. que una vez, al señor Molestina se le ocurrió con–
versar
ebn
el señor Seminario sobre las capitales de Atné'ri–
ca. Pasaron
r~vis ta
.a todas, y 'el señor. Molestina terminó di–
ciendo
-¡En la
tierra~ Qu~iol.
Y en ei cielo, un huequito
para ver
a
Quito
-¡A lo que el señor Seminario -
abriendo
mucho los ojos, y esgritniemdG
st1
bastón -
contestó
'-i
Só
1'11011/,0
mal agr-adecido, eso
1w
es cierto
1
En
la tÍJe1(ra, Piq,tra
¡Y
en
el cielo,
una
rajadura par-a ver
a
Piura!- ..
.
EN PIURA HA
Y
SECO CHABELO.
EN TRUJILLO HAY: ALFAJOR
Y
EN tHICLAYO QUE ES EL CIELO
LA MtJJER ES LO MEJOR¡
El
seco chabe o
es un sab osí [mo reh,ogado que se pre-
para con decina, pl-ata
~rd
, aj·Í, manteca
y
alguna otra
cosa más. Gene
lmet e
e acompaña on
chifles,
rodajas
de plátano frito qt
1a n las veces
ae
pan.. Indudablemente,
es el mejor boc .'
0
de a
reina
J?Íurana.
Los mej ores
secos cha e!os
se saborean en los chiche-
1
os del Tacalá, sobre mesa de algarrobo y en compañia de
garridas chinas de falda de cambray, y
hQmbres de cam1:inos
(itte preparan sus
golpes.
(asaltos).
·
El alfajor de Trujillo no tiene rival, especialmente cuan–
do s
prepara con manteca de Otuzco y chancaca de l<r ha–
cienda "Tomaba!". Cierta clase de éllos -
elaborados con
cascaras de piña . harina revenida
y
chancaca negrísima -
recibe el nombre de
tranca
a causa de la función que desem–
peña en el esfínter que mira a lo
talones. Es un fidelísimo
-~liado
de médicos, cirujanos
y
boticarios.
En cuanto a la mujer chiclavana. será suficiente consig-–
nar aquí la observación de un ingeniero imtlé. que instaló la
maquinaria de "Cayaltí":
-tiene las
o.fos
más g1·andes
que
1
us pie
.!- .
. .
EN REQUE TODO EL
~O
ES \ ERANO.-Tan
bondado~ o
es el clima de Reque ( Chiclayo) y tan grande la
ílrofu ión de flores que e ve en sus jardines, que cuando se