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borracho'', cortadas en tiras que se atan a la altura del tobillo. Esta
misma cáscara sirve para envolver los mazos de tabaco o ''manojo''
y
quizás sea ésta la causa de que se use el ' ' yuchán'' como amuleto,
pues, el ''tabaco de manojo'' interviene en1las curaciones de las
' (picaduras'' y cualquier cuerda o lazo o sustancia resistente para
atar los miembros e impedir que "suba la ponzoña''. El "yuchán",
en este sentido, es lo más empleado.
El ''diente de perro'' que colocan de un hilo en el cuello de las
criaturas de tierna edad, es un amuleto. Tiene la virtud de prot·e–
gerla contra el "malojo", pero también para que el niño tenga dien–
tes sanos, dientes fuert,es y sanos como los del perro, pues existe la
creencia de que la intención, manifestada reiteradamente bajo la
forma de amuleto, puede tener influencia sobre la salud y la enfer–
medad.
Para evitar el ''moquillo'' de los perros se les coloca un ''collar
de
marlos" quemados. El "marlo" es la espiga en que se insertan
los granos de maíz de la
mazorca~
o panoja. Por su parte medulosa
y
blanda
ras
·¡ ,
cual se ata al pescuezo del animal. Este
collar de "
rlos" nos rec e
ti
e col a de los e i cios, que lleva–
ban
sola en
d
' ' bijouterie''
usada enton s
Otr-o am
o de mu_elas
es
el
''busco
y
no
e piedra pómez que fabrica el
"usamic "
ti
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te o
e según la gente es
difícil
é
e rar. Esta esp ie e p1edr se t a cueHo de las per-
sonas a m
6
relie-ari6
y goza de propiedades milagrosas.
Con un
crlte~io
más general el pueblo suele tener entre sus ro–
pas,
bien · escondida, una bolsita que llaman "ateneo" o "atinco ".
Dentro de
ell~
se encuentran varios objetos y yerbas: piedritas, pa–
litos, hojas secas, etc. La virtud de estas bolsitas es ilimitada. Pre–
servan contra el maleficio y dan suerte en el juego y en el amor. Son
vendidas por los curanderos ' 'kollas'' que con sus alforjas recorren
de vez e1;1 cuando el vasto territorio de nuestra provincia. Su nombre
proviene del quichua: "ti:nku" o sea "junta de dos", según M. Lr–
ZONDO
BoRDA, o de ' ' tincuc ' ' que es el nombre que tiene un amuleto
para el amor.
Si la bolsita con el ' ' ' atinco'' no pudiera obtenerse, se fabrica una
para guardar
ad~ntro
"un
gaj~to
de ruda", q·ue también vale lle–
vándolo en el bolsillo.
Ma~,
este amuleto, no es contra las enferme–
dades, ni contra la mala suerte, sino exclusivamente amatorio,
y
tampoco para que le amen, sino, por el contrario, para evitar el