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Ademas, el problema de la escritura en el antiguo Per{1 esta

pendiente, en espera de estudio

y

soluci6n. Negacla por muchos cro–

nistas, esta indicada por algunos y rotunda.mente afirmacla en

la~

r

Historiales,

de Montesinos (1), qui en asevera que hasta cierta di–

uastia o reinado s-e maba- la escritura en el P eru y que los natura–

les escribian en hoj as de platano ; que lbs

chasqiiis

llevaban los

"pliegos''

escritos

de esta manera y que, debido a grandes calami–

dades publicas, se perdi6 dicha escritura, prohibida de usarse por

el Inca entonces r einante, por raz6n de que los Oraculos la habian

se,fialado como causa de toclns las calamidades que sobrevinieron.

Un diligente investigador de nuestra historia, el doctor Pablo

Patron (2), en un meduloso estudio se pronunci6 · por "la veraci–

dad de l\Iontesinos' ', a quien encuentra apoyado por las alusiones

de otros croni.stas a cierta clase. de escritura o de 'pinturas'' sus–

titutorias.

El doctor Urtega, en un amplio estudio posterior (3), basado

en muy bien documentadas informaciones y en el que anota valio–

~ as

investigaciones personales, formula interesan te consideracio–

ne : dice que la escritura j er oglifica, muy adelantada en los

pue.blos del rorte de America, no fue un "don exclusivo " de ellos:

pues "de Norte a Sur del continente aparecen las muestras del

lenguaje escrito con prueba irrefragables ". Cre.e que las pictogra–

fias-de las que clan noticia los cronista.s

y

lo confirman amplia ·

mente las investigaciones arqueol6gicas

y

los hallazgos pictografi-

os de 1iddendorf de Wiener

y

del mismo doctor Urteaga-' ' rnve–

lan despues, lo priucipios de una

es~ritura

icleogr afica que expre–

san uces '.6n de ideas

y

no simple represent aci6n de objetos";

y

con–

·luye e perando que pacientes

y

sistemados estudios futuros de los

americanista '' han de aportar nuevas pr ueba que confirmen la

existencia de una eseritura en las r egiones de la America del Sur,

y

sobre todo en el Antiguo P eru".

Pero si Iontesinos es quie.n trae la noticia tan concr eta

y

afh"–

mnth·a, tambien en otros cronista. se eucuentran r efer encias qne,

sin duda, mer ecen ser tomada en consideraci6n. Acosta (4), des–

pues de asegnrar que " los indios del Peru, antes de venir los espa–

:iiole , ningun genero de eseritura tuvieron' ', dice que aparte de la

(1) Memori a Historiales

v

Politicas del Peru.

(!!)

Revi ta Hist6rica

t .

r:

(3) Bocetos bi t6ricos, 2.• erie,

pag.

41.

(4)

Hi toria Natural

y

Moral de las Indias.