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EXPLORACION
F.
L CIIYENTF:S
DE VT,UE
se r renovado cada dos o tre
añ o~.
Jo.,
indí~ena~
e.
tán nldi–
gados
a.
t.raer en pE>ríodOR Oett> l'lllÍilfldOS Cle t'tO nÚmPl'O
dt>
varillas de especies pec uliares de madPra
t'esistt>n te, por lo
común de la \·ariedad
ll amada
lloqn e. las q ne son trenzad n:-1
por
expertos,y
en st>gu id n., Pxtend
i da~
a tro vés dPI río pot·
los
esfuerz.oscombinarlos de lo.· hnbitaotes. Alg·utHlS de lu .·
construccifln es más g t·andes e
intportante>~
dA ps ta c)¡:t
P
SOn
~nantenidas
ror el g·obíerno
y
t odos los pasnjHOS
y
mercaderías paga n un
po11
tA zg-o fijo : 'l'a 1e"' e-1
ca~o
del g-ran
puente sobre el ríu Apurima..:
t>ll
el cAmino re
nl C)llP
condn ee
del antiguo Huflmanga {ltoJ Ayarnchu) al t' u7.co ( 1)
El Apurímac
f!S
uno de
l o~
oríg·enes del
.\m 11Zo n a~ .
y
es
un río largo (2)
y
r áp itlu qtw corre Pll un n:tll e 1'rofntllh,, o
más bien, en una gigantesca quebrada, euce tTnd a por nlon–
taña~
elevadaR
y
¡n·pcipitosa:o>.
En tnda "'n long·it ud e. cru –
zado por un s6lo pue nte, 'entre dos
en1.rm~>s
JH'Peipiein"' r¡u e
se elevan yertig·ínosamente por ambos
laJo~
.r
forman
la ~
cumbres de lo
01
P el viflj ro mira como un golfo obsc ·Jt'O.
Eu el fond o hrii,.A u,n hiln blanco el e
a~:nfl
1
de rlonde a¡:;cien–
de un niid bronco
y
fue rtP-, qne da su nombre al río, pues,
Apu-rírn a , ,
ignifi ca , en 1 no·un quPchuR, el •·gran habla–
dor". Por en Hn8..t,el
pnPntf>,
pal'f>Ce. nna
~imple
cuerda
y
se llega a
'1
p
·un~
enda q ne semeja una línea blanca en
el corte de la montaiia
y
po r·
la cual vacila
Ptl
aventurarse
el más intn>pido vifljE>ro. Al
otro
l&do dPI puente, esta sen–
da desaparece de rep0nte de una ra-pis:a cor t ada en )a roca,
la que ofrece apenas el espncio Jlecesari'O para la choza del
cobrador del puente,
y
en !'!P.-guiJa pasa pol' un obscuro
tú–
nel abierto en la roca del q
u~
emerge
rm
ra
a~etmdev
un
áfif.
pero
y
tedioso zigzag por el
fl anco
dt> la montaña.
Es costumbre de los YifljPr<'s calcular . n t iempo a
fin
de llegar a este puente en la
mAñana
a.nt~d e que
comi~n
ce el viento, pues, durante la
tnfl.J' Ol'
pal'te del día sopla
· éste hacia arriba del cañón del Aput'ímac con gran fuerza
(1) Hace muchos aiios que el puente colgante de- que se t rata,
como el de Ollautaytambo
y
otros de su especie,
In
sido reennplazado
con otro de hierro, tirme
y
seg-uro,
y
los acciden tes que aquellos oca-
tonaban han pasado a la llistm;ia
;meedótica.
y
pin t oresca. Es sabi–
do que el 26 de
mano últrmo
t
1921)
han nribado a Ayacucho
Jf.J¡¡,.
raidistas que cinco meses antes pa:sa:ron por el Cuzco en un am–
tomóvil Ford, procedentes de Rosario (Argentina), 5.efiores Ram()n
Otges
y
Francisco Birke.- N. del T .
(2)
En efecto, nace muy cerca. del Pacítico
y
lleva. sus aguas ha..c;..
t a el
Atlántic~. -N.
del T _