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Ch
muchas veces se pironuucia
ts;
pero no es
po~ible
señalar
qi
aún en el vocabulari.o, cuando se hace esta
transf 0rmación. Hay en ·ello tanta arbitrariedad quP. .un
rn ·1smo
individ·-~o
pronunciará
chupa,
y
poco dtspués
ts1t:
pa.
S!nembargo · hay palabras que nunca admiten
la
transforrnac1ón de
ch
en
ts.
E
1
uso
lo enseñará.
S
se transforma en
sh
(ch francesa) con la misma ar–
bitrariedad. Ad viértase que la confusión entres
y
sh
ex–
plica las
do~
pronunciaciones de
ch,
que.
~quivalen
' á
ts!t
y
ts.
1
•
-
Por el callejón de Huaraz
ai
se pronuncia [abierto;
au==
ó
abierto;
y
ui==i,
s~1primiéndose
_la
u:
Ej.:
mi–
cui==1niqi.
En las provincias
trasa~dinas
v_
g.
Huari,
Pumabamba etc.
se
pronuncian como en ca tfllan ()
ai,
au;
pero en muc.has partes persi'sten
en
suprimir la
u
de–
Jante de la
i
(ui==z').
Las prin o!p,ales transformaaiones f0néticas al
pa~ar
lo~
vocablop del
a
lec to del Sur á éste,
son:
Sen
H:
E.j.,
Jiuasi
en
lzualzi
{oasa);
kosa
(marid<?) en
koha _; CliÚstl1i
(-vivir) en
e
uha-Jz .
bien
·.S
e!1
J,
y
J
e11
S
ó
Sh: sachn
(arbol) en
g acha.;
J a nun
( enir) en
Shamun.-Ñ
e.n
N–
Ll
en
L.
B. GRAMÁTICA
Los cambios de partículas
~on
alg0 numtrosos .
· NOlVlIN A L·ES
Declinativas:
en lugar de
pi
(en)
chau;
en
1
ugar de
manta
(de)pz'ta,
y
en Huaraz;pek;
"ha~ta"
se rl.ice
cama
como en el Sur,
óyak.
Ej.:
Huahinchau,
en su c asa;
mar –
canpita,
de su pneblo;
clzacayak,
hasta el puente.
Mas _fácilmente que en el Sur, las declinativas
~e
ha–
cen den va ti vas, ''· g.
man
üsado como
ñek
del Sur.
La
posesiva
de primera persona ·es una as pi ración,
lz,
que alarga la última vocal. Ej.:
taüah,
mi padre.
Eatre las
derivativas:
mahi
por
masi.
No se usa
nrzak
ni
ñek
ni
nz'sca;.
pero se usan además de
sapa,
masó- me–
nos con el mismo valor,
sh,
y
sha.