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HUELVA ILUSTRADA
dores y genealogistas poco favorables á
Huelva. También es de creer que seguiría
otro orden el P. Hierro, y que se extende–
ría más en polémicas, de que nq saliera tan
bien parado ni con tantos elogios como le
da el Sr. Mora (págs. 23, 29, 35¡ y 18 de las
Noticias),
la famosa «Dissertacion Histori–
co-Geographica, sobre reducir la antigua
Oouba a la Villa de Huelva. Por el Doctor
Don Antonio Jacobo del Barco y Gasea.....
Con licencia: En Sevilla, por Joseph Padri-
1
no, en Calle Genova. Año de 1755»
1
en 8.
0
,
de 96 págs. s.,
20
hojs. de port., etc. (con
una lám. y un mapa).
En conclusión, la
Huelva Ilustrada
no
es del P. José del Hierro, pero hay cierta–
mente en ella «algunos retazos» suyos, to·
mados, según todas las probabilidades, de
su
Huelva vindi'cada,
como la llama Muñoz
y Romero, ó sea
Huelva A ntigua,y N ueva,
como creemos que realmente se llamaba.
En la Colombina, de Sevilla, existe una
carta muy curiosa del P. Hierro al Conde
del Aguila, sin data ni fecha, pero escrita
seguramente á fines del año de 1755 ó poco
después, en fol.º, de 4 hojs.-Háblale en ella
del que «tomo la mano para firmar la obra
comun de dos,
b
tres,
b
mas », ó el «Author,
sea el que fuere» de la
Di'ssertacion Histo–
rico- Geographi'ca,
y le avisa luego lo si–
guiente: «En lo que mas intereso .el favor
de V. S. es en que desengañe al Author que
no merezco el Concepto errado, y calum–
nioso, que de mi forma, que no tuve otro
motivo p.ª impugnar, que ver frustrada mi
idea' y preocupada mi especie a favor de
la
:l.ª
Patria con la Dissertacion. Dos cosas
me sincerizan . La r.• que no es tanta mi
limitacion, siendo mucha, que sintiera tanto
ver occupadotao cortoterreno; quedandome
tanto campo p.ª dexar correr la Pluma.
La
2.•
que au n en la misma materia esta
tan ceñida en las Glorias de Huelva la Dis–
sertacion, que en nada impide, que contioue
mi jdea mas completa, y difusa, y de mas
agrado p.• el Paisanage con este titulo, que
sabe V. S. esta prefixo:
Huelva .Anltgua,y
Nueva.
Aqui se vera lo solido que ai a favor
de su Antiguedad, que es poco, cercenan–
dole lo dudoso, y mal fundado de la Disser–
tacion; y porque no todos gustan,
b
entien–
den de esto, tendra abundante pasto la cu–
riosidad en ver la Historia de Huelva desde
su Conquista, que fue la Dama pretendida
de tantos Galanes, como Dueños tuvo, que
fueron muchos: los Privilegios estimabilis–
simos, con que la honraron los SS. Reyes
Catholicos, aunque algunos ya vulnerados
por lo que se expresara: sus terminas anti–
guos, y los que de ellos se desmembraron
p.ª otras fundaciones: una Chronologia de
los successos Memorables de esta Villa; una
descripcion de su Vecindario, Parroquias,
Conventos, Familias y Edificios Publicas:
ultimamente un jodice de Personas Señala–
das Naturales de esta Villa. Hagale ver V. S.
la copiosa materia que me queda , sin terier
que embidiar las cortas migajas que se me
preocupan» (págs. 2-3).
En la misma Colombina se conservan
también originales sus «Reparos Cvriosos
sobre la Dissertacion de Onuba que acaba
desalir», en
fol.
0
,
de 6hojs.-Están firmados
en «Sevilla, y Ag.
10
14. de 1755· El insi–
nuado»; y en ellos confiesa el P. Hierro
que le es muy grato el asunto de la
Disser–
tacion
«por un genial cariño que conservo
(dice) a esta mi segunda Patria, y por aver
conspirado mi pensam.
10
con la idea del
Author, hallandose entre mis borradores
algunos rasgos de mi pluma, lineas que se
encaminaban al mismo centro de vindicar
la antiguedad de Huelva de las injustas,
aunque authorizadas, usurpaciones, con que
la invadieron algunos escriptores:. (pág.
l.ª).
Los «rasgos» á que alude aquí, son, in–
dudablemente, los de su
Huelva Antigua, y
Nueva;
y esta
Huelva,
cuyo paradero ig–
norarnos, la que, á nuestro juicio, suminis–
tró al Lic. Mora los «retazos» que reconoce
por suyos el P. Hierro.