1
de la Doctrina de la
Pfrtud.
34S
necesarias,
asi
tambien
atemos
la
imaginacion
á
buenos
y
san-
§.
VIII.
tos
pensamientos ,
cerrando la
puerta
á t.odos
los otros.
De la reformacion del entendi-
P.ara
lo
qual -conviene
que ha-
miento. ~
J
ya
cle nuestra parte
grande
dis·
.crecion
y
vigilancia para
exa-
DEspnes
de todas
estas partes'
minar quates pensamientos de-
y
potencias del hombre
res–
bemos admi.tir ,
y
quales des- ta la mas
alta
y
mas noble de
echar;
para
que
á.
los
uoos
red- .
todas,
que
es
el
.eAtendimie
nto;.
bamos como
á
amigos ,
y
á
los
el
qual
entre
otras virtudes
h:i
otros
de~echemos
como
á
ene· de ser adornado con aquel
la
al.
rnigos, Porque los que
en esto tfaima
y
rarhim:,i
v!rrud de la
son desproveidos , muchas veces prudencia
y
discrecfoa.
Esta vir–
dexaa
entrar
en
su
áninu cosas
'tud
ea
la
vida espiritual
es
lo
que
que
le
quitan no
solamente la
los oj@s
ea el
cuer.po,
fo
que
·et
devocion y el fe-rvor
de
la
cari-
piloto en el
_navio, lo
qllle
el Rey
dad,
sino
.tambien la
mesma
ca-
en
el
Reymo,
y
lo qtte
el
gober·
ridad, en que estf la vida del nador en el carro, qtre
tiene
p<>r
ánima
(a).
Durmiése
la
portera
olido
lleva,r
las
riendas
en la
del
Rey
lsboseth
(que estaba mano., y guiarlo por donde
h,3
limpiaade
el
trigo~
la
puer.tade de
camioar
(9).
Sin
esta
virtud
, su
recámara)
y
entraron
dos
fa,
la
vida
espirin1al
seria toda
cie–
dTones
famosos,
y
cortaTon
la ga,
desprov~ida,
desconcertada
cabeza al
Rey. Dé
esta manera,
y
llena de
confüsion.
Por
donde
pJJes
quando se
duerme
la
discre-
aquel
b.ienaventurado padre An-
cion , que tiene por
oficio esco-
toni.o
en
un ayun'tam.iento
que , ,
ger
y
apartar la
paja
del grano tHvo con otros santos Monges
-( qae
es
el buen
pensamiento del (donde se trataba de la
exce–
. · malo) entran
tales
pensamientos lencia de
las
virtudes} vino
á
en
el. ánima. , que muchas veces poner esta en altísimo lugar,
co–
le
quitan la vida.
mo á guia
y
maestra de
todas
las
Y
no
solo
para
conserv_.ar
esta otras.
Por
donde
todos los ama–
v!_da,
sino
t~m?ien
para el
silen- dores
de la
virtu.d
deben seña·
c~o
y
recog1m1ento de la
ora- lada
mente
ponec sus
ojos en
ella,
c1on
vale !Ducho
est~ dili~en~ia:
·para que asi
puedan
aprovechar
porque as1
como la 1magrnac1on mas en todas
las
otras.
inquieta
y
corredora
no
dexa
te-
Esta virtud
no
tiene un
oficip
ner
oracion
sosegada · ; asi Ja solo,
sino muchos
y
divers9s:
recogid~
y
habituada
á
santos
porque
no solo
es
vfrtud partÍ,CU•
pensamientos ,
fácil mea te
per.¡,
lar,
sino tambien
general
que
severa
y
se
quieta
en ellos.
entreviene en
los exercicios de
Xx
to-
(a)
2.
Reg.
4. (b)
Carianus
~.
Collatione
de
diséretione.
p.
2.