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1 s~ . Libro p
de tal manera es ayudado p~r que ellos desean. Mas des.
epa, quel prev~lece contra este e el Salvador vino al mun–
t1rano, y ie sujeta y hace obe. do, hizo pasar á este tirano por
decer á lo qu~ es razon. la pena que él daba á los otros,
Esto .fué maravillosamente fi- cortándole los pies y las manos;
gurado en la mu~rte de Adooi- ·esto es, deshadendo y quebran–
bezech, Rey de Hierusalérn \ á ·tando todas sus fuerzas. Cuya
' quien mataron los hijos de (sraél, muerte señaladamen te se dice
cortándole primero los pies y las que füé en Hierufalérn: porque
,, manos (a). El qual como as.i se ahí fué donde el Salvador del
vjese , y se acordase de las cruel - mu ado , muriendo , mató al
dact ~s y tiranía5 que ha'ita alli príncipe de este mando; y don–
habia usado, dixo estas palabra ;: de siendo él crucificado, le cru·
Setenta Reye~ cott:tdos los pies cifi có y ató de pies y m1nos, y
y las manos comían debaxo d~ mi le ·quitó su poder. Y a~i luego
mesa las migajas que de ella caiao; des pues de su sacratí~iml p_asioa
y ahora veo que de la manern 9iu~ co·neazaron lo~ hombres á triun·
yo.lo hice , asi lo ha hecho Dms far de este tirano, euseñoreáado·
conmigo. Y aiíade la Escricui:a se tao poderosa!lll.!nte del mun–
que lo lleva11oa asi co;no estaba d9 , dd dem.1nio y de tolos sus
á Hierusalém, y que. ahí murió. vicios y apetito~ , que todos los
E">te tan . cruel tirano figura es torm ~ntos y halagos del mundo
del príncipe de este muodo ; el no füeroa bastantes para derri–
qual antes de la v fl1Üa. del Hijo barlos en w1 pecada mortal.
.§. IV.
,
de Dios generalmente m .rncaba
los hombres de pies v de ma.nos,
destroncándolos é iph'.lbilitáado–
los para servirá Dios, cortándo· De las causa,· de do procede esta
les las manos para no hacer bien, libertad.
y los pies pa~a · no desearlo ; y
demás de esto haciéndolos anda.t·
comiendo las migajuelas pobres
que de su mesa caian , que son
los deleytes mundanales y sen 4
suales, con que este ma_1 príncipe
apacienta á sus servidor~s : los
quales con mucha razon .se lla–
man migaj ns, y no pedazos de
pan; por la escase:t:a grande con
qúe este tirano reparte á los su–
yos estos r~lieves ; pues nunca
se los da en la hartura y abun-
P Reguntarás por ventura, i de
dónd e esta tan ma •
ravitloc-;a y libertad~. A
esto digo spues de Dios
procede primeramente ( co~o ya
diximos) de la divina gr.u;ta, la
qual mediante las vinudes que
'de ella proceden , <le tal manera
adormece y templa el furor de
nuestras pasiones , que no las de·
xa prevalecer contra · la razon.
Por donde asi como los encaa·
., ta-
(a)' Judic. J.