135
V
ndades, que ratificó el re.
pe
table
J.
Pedro de Soto, al tiem·
po de morir, en la carta que
le escribió
a
Pio IV, de cuyo
hecbn tambien dá noticia Palavicini.
SED rector s y doctores como yo
lo soy: tened la
p~·
tel'ltad de perdonar los pecados, que
yo
tengo.
Ruperto, Cn·
sostomo, Theofilato, Cirilo juzgan con arreglo
á
la misma le–
tra' del evanjelio, que
sa
les comunicó el <•ficio, autoridad y
toda la potestad eclesiastica; por cousiguiente, que fueron en–
t unl·es creados O hispos. Es un arrojo de Belarrnino asentar
como proposicion segura (.) que Cristo Señor Nuestro, orde·
nó unicamente Obispo.
á
San Pt>dro,
y
que e te ordenó
á
los
d<'mas apóstoles. Ni me convengo cc1n
Suarez, en que los
apostole. fueron ordenados Obispos por e l Seño r, aunque du–
da el
lngar
y
tiempo. (,) El evanjelio es el documento de–
cisivo. Diré por ultimo con San Agl!lstin--/pse
enimpriusquam
iu ere/os ascenderrt imponens rion1en opostolis ordi11avit episcú–
pos--(
;;
¡,'
aldra mas
tl
te~ti monio
de Bt:la1mino, que
f'I
de San
Agustín?
1
EN
la congregacion del
15 de
Octubre, insistiendo el Ar–
zobiApo de Bra ·
en que se
o
Gla ras
que
la institucion de
lo Obi ·pos era
e
€'1
cho divjno, nefl xiotmha así: "Que el
Papa no pocha
t
·
los Obir;;pqs la autoridad que habían
recibido en
u
con~a
raci1111.
Que e mprendía, no solamente
el pocle1 ele
ord
, sino el de jmi dicci()n, pues que se les se–
ñala La un rebañ , que ap&renJar
y
conducir. Qoe sin esto
la ordenacioo seria nula; si<•ndo
la pmeba, que en la ele los
obispos titulares, se le señalaba villa, la que no seria necei,:a-
1·io, si el obispad0 podia isubsistir sin la jurisdicc irm. Que ha–
bía otra prueba
y
era, q 11e poniendo le en· Ja mano el baston
pastoral, la fi'irmula que acompaña esta ceremonia, manifesta–
ba, qu e era un i;igno, que se daba al Obispo de l poder de cor–
rejir . los vicios. Que habia dra mas
fuPrte, diciénd les al
entr~garles
el anill•J, que se esposahan con la Iglesi a. Que en
pn·sentandoseles el
libro de los evanjelios, por doncie es im–
preso el caracter epi copal, s<· les decia, que .se les enviaba
á
predicar al pueblo, que lrs era e nfiado.
Q
e al fin de la con–
sagracion se repite la oracion
Deus
omnium fidelium Poitor
et rector,
donde se bablabH con Dios, que había querido que
-------··-
[ ·l
L ib.
1
de Pont. cap.
24.
[,]
Tract. defide. D.
10
1 1
it.
8.
[ ;]
Q
98
in Nov. et vet .kst.