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CAPÍTULO XVII

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él la oia, quebrando rosarios y pisando bolsas de reliquias,

diciendo que no tenia necesidad de confesarse, porque no

tenia pecados, ni ayunaba, haciendo menosprecio del ayu–

no, mostrando en esto ser observante de la secta de Lu–

tero; diciendo que lo que él hacia no lo habia de pagar

su vientre; menospreciaba las penitencias

y

actos merito–

rios, error de calvinista. Confesó sus delitos

y

mostró

arrepentin1iento.

11Diego Moran de Cáceres, natural de Sevilla en España,

menor, por casarlo dos veces; la primera con una mestiza

en el pueblo de Chacayan, corregimiento de Tarama;

y

la

segunda en Chuquisaca, ambas vivas.

11María de Santo Domingo, beata de su Orden, natural

de la ciudad de Trugillo, en estos reynos, de edad de vein–

te años, a quien comunn1ente llaman la de los dedos pe–

gados; porque fingió habérselos pegado Cristo Nuestro

Señor y su bendita Madre, durmiendo cuidadosamente,

porque no le conociesen su embuste. Y publicando haber

sudado un niño

J

esus, a qujen ella misma babia echado el

agua; afirmaba que era castigadora de demonios, a quien

ataba, poniendo en prisiones, y mostrando dominio so–

bre ellos, fingiendo misterios en pasteles

y

comidas, a que

se inclinaba, y muchas revelaciones, arrobos, éstasis

y

vi–

sitas de Nuestro Señor

y

de la Vírgen su Madre,

y

que

bajaba al purgatorio a sacar tales y tales almas,

y

que co–

municaba con Santo Domingo

y

otros santos. Confesó

muchas mentiras que habia introducido

y

revelaciones

, que habia compuesto,

y

que siendo embuste lo aseguraba

por verdad, porque la tuviesen por santa, y ganar el

aplauso popular

y

de comer,

y

llevándola en una carroza

ciertas personas al anochecer, llegó al estribo un hombre

arrebujado, que pasando se reparó, por descartes curiosi–

dad, dijo ella a las demas de la carroza: 11¿no ven?11 no

vieron al Anjel Santo que llegó aqui. en mi busca? a que

le dijeron, no era sino un necio arrebujado que llegó pa–

sando. De todo mostró arrepentimiento

y

confesó su li-

viandad.

·

11Garci Mendez de Dueñas, natural de la villa de Oli–

venza en Portugal, de edad de cincuenta

i

ocho años, ca–

sado en San Lúcar de Barrameda,

y

tenia su muger e hi-