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\"cnganza, en
de~pedie
á
los que
~la
co1np r.,ñia
no
e:3 Li
obligad~
á
retener por el órden de la caridad. Será.
conveniente
]a
medida, cuando se trate de súbditos
incorrejibles; pero otras veces habrá motiYos vitupe–
bles, por 1uas que se aduzcan razones ó pretestos,
pa–
l'a
acreditar la pureza del procedimiento
y
el interes
de la con1pañia en hacerlo.
Al
hab]ar de esta n1ate–
:ria
un
venerable obispo, se expresa así-"]as otras re–
,lijiones toleran
á.
sus hijos como n1adres,
y
emplean
,, una paciencia cristiana y perseverante para levantar–
,]os; mientras que la compañia los despide sin
tí–
,tulo, sin cóngrua, y los expone
á
peligros
y
n1i ·
,.,serias; grava al clero· con pobrisimos y
11
o necesa–
,rios sacerdotes; llena el Inundo de
eclesiásti~os
ig–
,,norniniosamente espulsos
é
infan1ados.; y se infam<t
,.,á
sí mis1na con tantos despedidos: porque si son
,buenos, se acredita de ingrata,
y
si malos,
de
sospe–
,,chosa; pues no es posible que una doctrina perfecta
,,y
una educacion santa enjendren tantos hijos per–
;.versos. Ven1os hoy expulso al que a,yer era alabado
,de los n1isrnos jesuitas,
y
habiendo castigo sin co–
,nocer la causa, se murn1ura no solo de los expu lsos
,sir..o tambien de quienes los expelen.
Y
o conocí en
,,esta tierra un provincial, que en tres años expelió
,treinta y ocho sacerdotes y relijiosos, sin embargo
, .de no constar la provincia sino de trescientos: otro
,,provincial expelió ochenta en la 1nisn1a provincia.
,0
la compañia procede con lijereza, ó es abundante
,en
a
e]
itos."
37. IIay otros 1nedios de forn1ar los superiores de
]a con1pañia, á medida de su corazon, los instrun1m1tos
de obrar en su tenaz propósito, y de remover los obs–
táculos que les hagan resistencia.
J..~
os profesos de
tres votos solemnes y del cuarto hacen voto sin1ple,
de
no
admitir prelatura, á no ser por mandato del su–
pet'ior. Este voto de desprendimiento en
varone~
sinceramente humildes, puede ser
un
pretesto en el
superior, para no comprometer los intereses de la
eompañia con la causa del episcopado,
y
para conser–
var
los jesuitas con1pleto su espiritu en todas partes,
;í
prueba de la confianza dEtl general. El
P.
Rivade–
neira dice
á
este propósito
y
en su justificacion-'"ln
iglesia de Dios hace percibir mayor fruto de los nues-