_..... 26 .
té
de 1a bumanída.d no
procura
su
bien
propio, nó
1&
]eva.nta
sobre el bien ajeno,
no
intenta singularizarse<
~lino
po1·
sus
servicios, qüe desde luego
lo
ensalzan
sin
que
él
lo advierta, quedando
á
otros el espontaneo en–
cargo
ele
colocarle en el puesto glorjoso que
le
convie-·
ne.
No
asi
el que solo se atiende
á
sí rnismo en
el
bien
que
hace
á
otros:
aquí
no hay gloria, todo
es
egoismo;
rio es digno
de ningnn
noble
~entüniento,
ni aun de
g.I~atitud.
¡Qué
diferencia entre los apóstoles, conduc-·
tares de la buena nueva, sin otra mira que la de hacer'
bien en el non1bre de
J
esus,
y
los padres ignacianos,
que
cubrian sus 1niras propias- con el sagrado non1bre
de compañia de
J
esus! Las- obras den!ne.:;tran
á
sus
a.ntores.
32. Algo de
mnbicion han visto nuestros lectores en:
él mnpeñó de la
co1npañ.iapara obtener privilegios po1 ...
singularizarse,
y en la acnrnula.cion de riquezas, co–
tno recurso poderoso para lograr lo intentado
y
frus–
ta:r
las resistencias. Van
á
ver ahora esa construccion
particular de la compañia, esa singular econon1ia en–
teran1ente
suya,
que
]a
distingue de
}as
demas órdenes·
J· egulares.
En
estas una sin1ple nürada basta para co–
üocerlas-religiosos que l1acen tres votos solen1nes
de
obedjencia, pobreza
y
castidad, unos en la carrera del
1ninisterio sagrado, ó de
corona,
y
otros que
11aman
le_;,
!JOS
para el 1ninisterio de cosas temporales. Para. co–
nocer
á
l
os jesuitases preciso hacer a]gun estudio--'
esc{)lares,
coadju.to?nesespirituales, coadjutores temporales,.
profesos
de tres rotos,
y
profesos de cuatro votos.
El pro-–
pio padre Suarez con su talento
exirnio
buscaba varioP.
modos de darse
á
entender,
y
asi decia-"para
n1ayor·
)) daridad,
y
quitando el
non1bre
de los
escolares,
po..,
)) demos decir, que en la co1npnñia hay reHgiosos
apTo–
))
hados, fonnados
y
profesos;
ó
do otra n1anera, que
al-–
>>
gunos son religiosos en c.uanto
á
la sustancia, sin ha–
))
flarse en el
últin10
término·; otros que se
hallan
en
el
)) térn1ino,
sin
la profesion solen1ne,
y
otros-profesos;n
r
no acaba
aquí
el.padre jesuita sus explicaoiones. Fe··
'tipe
II,
rey de España soJia decir,
que
"de todas
las
>l órdenes ·re] igiosas la de los jesuitas era la única que
>J
.no
podia con1.prender.>J
Y
en esta con1plicacion
no
~ería
difícil dese
u
brir
los rnedios de
asegurar
una
ten–
dencia
;unbieiosa,
nt
;sea I'>ara
fonnar.
ó·
pant
couse1·-'-
,
t.l
,/
.....