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:rws al Dl'1Jilrin dol snperior, que puede

orden~rles

Tf.i

J'f•nn ncia.-No adquieren nuevos b1enes sin

licencia·

· dt;l

superior-Pecan distribuyendo s

us bie

nes

ó

renun–

eiandolos sin licencia del supqrio:r, u.un €t.1ando re-

1nu1cio

en favo1r de

ca1,1sa

pia.

26. A vista de las sentencias anteriores, que no· oon

las

únicas por cierto-, forn1-arán jnicio nuestros lecto–

res

do

la

oxt.rvña

manera de c01nponer

los padres

je–

suitas las grandes riquezas. con la santa pobreza, po1··

medio de distinciones

y

sutilezas, quo ilnpidiendo

la~

adquisicionoPr

por-

un

lado·,

las facilitan

y

acnrnulan

pm··

otro,

y á

vecos

de

n1odos

tan

chocantes

y

des.apiada–

dos en

personas de

ofi.ci.o

santas

.'l

piadosas-,

corno aca–

ba de Yerse en el novicio qne haciendo renuncia de sns

bienes en

Üt\Tor

de

la

conlpañia,

si despues es expeli–

do,

no

hay

o.h1igacion

de·

dm~olver1os

en rigor de

j

u~

...

ticia, sino darle unfiJ par-te por -prudencia

ó

n1isoricor–

dia,

ó

por

derecho de ,q,ratdud,

si uo tiene-

~on

que

n1an

~

tenerse.

Se admirarán 1nas los

lc~torcs

de esto Jnodo dcexpre–

sarRe

los

padres jesuitas,

0uanclo

sepan,

que hacen

esr

tos alarde do su pobreza,

y

de no ceder en ella

á

nÍll–

1na

otra

rcligion

de

las nuts pobres.

JI~

aquí

eon1o

se expresa

el

P.

HiYadencira-"en

lo <}ne toca

á

1a po–

>J

b.reza de las

c::tsns profesas,

no Jo

hacen ventaja ni

))

aun

1a~

religiones que rnas la profesan. Porque de–

)) rnas de que no. pueden tener renta on co1nun para el

)) sustento de los religi.osos, tan1poco la pueden

tene1~

))

para 1a fábrica de la

iglesia

ni para la sacristía.

)~

>J

los frailes n'lenores que profesan la stnna

y

perfoctí–

))

si1na pobreza, pueden tener por vja de legado pio es–

))

ta

renta

para

sus sacristías,

y

capellanías

y

aniversa–

))

r1 os funerales porpétuos.»

Segun

esto, se agrava la

d1ficu ltad

en

htR

tinieblaf-l

del

misterio,

al vor

tan

rica

1a cornpañia en rnedio de·

tanta profesion de pobreza,

~'n1ayor

y

n1as estricta

qu~.t

]a de

los feailes rnonores.)) Por<}ne 11adi.o,

ni

los

je~ui-·

tas m1srnor,, ncgariau

las

granf1cs riquezas que

han

te–

nido

de 11

1uchos

v adn1iral)les rnodos, aun cuando no

fncra

rn.as

q_nc

OC;har

la

vi ,

tft

á las

YalioRaS

finc~S

que

poseyeron . . Pongan

nora-1n1ena.

restricciones, cierren

una:pnerta.11ara adquirir; ¡<1_nc in1porta ello, cuando de–

j:tn

nbiertas 1nuchns por

donde los entrar:1. el caudalt