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..gl\osisih).o
y
-TI!-ny·
te1ner~1~io
sostener
á
les
Je.suitas
en
ras actuales CircunstanCias. Que Roma sohcite que se
les trate con benignidad, y emplee los medios posi–
bles para conservar la sociedad; pero sufriendo una ,
reforrna.
Y
mi dietá1nen es, que cuandó se hubiesen
11racticado estos n1edios, se ponga el espediente en
·manos de Dios
y
en las de los soberános. Roma siem-
.pre necesitará de
la
proteccion y socorros de las po-
tencias católicas, y nunca logra mas gloria · y· autori-
.dad, que cuando al parecer cede á los soberanos ......
La
iglesia no conoce sino dos órdenes necesarias y fun–
dadas por
J~
C.-los obispos y los sacerdotes ......
Si
hu.biese menos .entusiasmo
y
mas principios, todos es–
tarían conformes con estas verdades; y lejos de soste-
·ner· temerari::nnente un cnerpo, del que se creen ofen–
',didos los soberanos, este n1isn1o cuerpo solicitaría re–
tirarse por si propio sin n1ur1nuracion ni estrépito;
' pero desgraciadamente todos acarician su ilusiou,
y
creen que no se puede tocar á un instituto, sin ofen–
rl.erla herencia misma de la religion." ¿Ifay en tan
juiciosas
y
cristianas palabras-resolucion de estinguir
·1a
~eon1pañia sú~
repa1·ar en la fusticia?
N
o. En otra car-
ia
de
7
d-e Enero de
1769
verán pensamientos seme–
jantes 1os 1e.ctores.
El señor ·Gntierrez de la Huerta miraba como una
grav·e
falta la
de]
sacro colejio, que se puso
¡en
un
Ole-
.
.rnenie
XI
V!
¡Estraña ocurrencia!
.El
fis9al podía ha–
-cer n1érito en su dictamen de las opiniones del
Sr.
Gutierrez -de la Huerta
á
favor de los jesuitas, para
fundar su restableein1iento;
y
el papa
!JO
podía, no
debía hacer recuerdo de las· razones del cardenal para
,estinguii· la compañia. Los lectores notarán la diferen–
.cia
en el modo de espresarse el cardenal y el fiscal. ·
Por lo que hace
á
la retractacion que hizo Clemen–
te
XIV,
y entregó
á
su confesor, decimos, sobre
el
. irrecusable testimonio. del
P.
Theiner, que "cinco dias
antes de moTir,
ó
en
17
de Setiembre de
1774
espidió .
11n
breve a favor de los jesuitas surnisos de Brausberg
poniéndoles por condicion que en todo
se sometiesen
;.l.
las disposiciones del breve de estincion, y que
no
se
~omunicasen
con sus antiguos superiores.
I..~o
que sirve
de respuesta
á
los pretendidos breves·de
-7
y
29 de
J
n–
lÜO
del.1ni~1~9.
añ<?.; el prin1ero para que se
~antuvie-