~
330-
.
soli Domino atque·romano pontifici, ejas in te?Tis vicw·[a
servire.
Palabras horribles en lo que se refieren al Pa..
pa, como si
a~n111ciáran
un otro Dios, y una nueva re-·
lijion sobre la tierra.
· Y
t an justo é incontestable es el cargo que se aca··
ba de indicar, que para evitarlo, fué preciso ocurrir
á:
la audacia de negar, que hubiese tal palabra en la bu-–
la, como lo refiere l\1:. de Chalotais en su segundo in...
forme al parlamento de Bretaña, y despues de citar
las dos bulas, y de copiar el texto que acaban de ver
nuestros ledores, continúa así- "yo no pienso que se
diga, que
solí
se refiere á Jesucristo y no al Papa, pues
segun el uso de todas las lenguas, cuando se dice, por
ejemplo, de ciertaStpersonas, que están sometidas á la
ju:risdiccion del Rey
solo
y de sus
parl~mentos,
queda
escluida la jurisdiccion de los demas tribunales. Si
fuere menester un comentario á estas bulas, lo 61Tcon–
trariamos en la de Gregorio XIII
Ascendente Domino
ele 1584 donde se dice, que nadie, fnera. del romano
pontífice, puede entender en los mencionados votos–
NULLI LICET,
prceteT romanum pontificem manum appone–
re.
Añadiré, que el
voto
especial de obediencia al Pa..
p'a, se estendia á todo Jo qué los papas quisiesen orcle·
nar. Despues las congregaciones generales y los p-re·
pósitos generales han reducido el voto á la.s
misiones,
pero á Yista de las primeras bulas, yo sostengo, que
tal Yoto de obediencia al papa es indefinido, univer–
sal y sin restriccion.>>
l\1as permitiendo que no hubiera en el texto lapa–
labra
solí,
y
aun tomándonos la licencia de quitarla,
si ella agrava el escándalo de la frase, no lo crea por
cierto. El escándalo consiste en espresar
con
4
un mis.J
mo nombre el
s~rvicio
que ha de prestarse á
J.
C.
y
al Papa-DOMINO
atque
ROMANO PONTIFICI,
ejus vicario
servire:
servicio que ofrecían los que estaban solicitan–
do la aprobacion de su compañia poe el
~apa:
servi–
cio que no seria parecido al que dispeüsan los minis–
tros sagrados en obsequio
y
útilidaa de los :fieles cris–
tianos. No, no: los padres jesuitas no ofrecían
ser-vjr
al Papa como ofrecían serYir á los símplett fieles. Los