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- Si-
quirirse los contratos
y
títulos de posesion,
y
si así
fuere se enterarán de si han de ceder algunos de sus
bienes al eolegio ó por usufructo
6
por alquiler
6
en
otra Í<:ll·rna,
ó
si podrán venir á parar con el tiempo
en la Sociedad; al logro de lo cual, será muy á pro–
pósito dar á entender especialmente
á
los grandes
y
pudientes, la estrechez en que vivimos
y
las deudas
que nos apremian.
8.° Cuando las viudas
6
casadas nuestras devotas,
no tuviesen mas que hijas, las persuadirán Jos nues–
tros
á
la misma vida de devocion
6
á
la del claustro,
para. que excepto el dote que haya que darles pue–
dan entrar sus bienes en la Sociedad paulatinamen–
te; mas cuando tengan
varones~
á los que de ellos
fuesen
á
propósito para la compañia, se les catequi–
zará,
y
á los demas se les hará entrar de religiosos
en otras 6rden es, con la promesa de alguna suma
reducida. Cuando sea un hijo único, á toda costa
se le atraerá, inculcándole la vocacion como hecha
por Jesucristo, haciéndole desembarazarse entera·
1nente del temor
á
sus padres,
y
persu:-tcliéndole de
que hará un sacrificio muy acepto al Todopodt->roso,
si se sustrae
á
su autoridad, abandona la casa pater–
na
y
entra en ]a compañia; lo que si así sucediere,
despues de dar parte al genera], se le enviará
á
un
noviciado distante; mas si tienen hijas, se dispon·
drán primeramente á las hijas para la vida religiosa
y
se les hará entrar en algun 1nonasterio,
y
despueH
::5e recibirán
á
los hijos en la compañia con la suce•
sinn ele los bienes.
9.
o
Los superiores pondrán al corriente
á
lo~
con..
fesores, de las circunstancjas de estas viudas
y
gen ..
tes casadas, para que ellos las aprovechen en todas
ocasiones en beneficio de la Sociedad,
y
cuando por
n1edio de uno no se sacare partido, se le reemplaza–
rá
con otrot
y
si
se
hiciese necesario, se le
mandarct
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