Previous Page  352 / 392 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 352 / 392 Next Page
Page Background

~

34.2-

»

riza al

cupablf~

alli era la causa de su mayor

consuelo~

aho ..

»

gando el remordimiento con la expiacion ..• El1nejor de los

»

Gobiernos sería una teocracia en donde se estableciese el tribu...

>>

nal de la

confesion~

pero dirigido por hombres virtuosos (1).

»

No son menos atendibles las palabras de

~eruttí,

el fogoso revo–

lucionario ardiente amigo de Mirabeau :

«

Inspirar horror y arre–

».

pentimiento del crimen (decía), poner un freno á la

maldad~

dar

»

un apoyo

á

la inocencia; reparar las depredaciones del robo,

»

estrechar mas,

y

mas los vinculas de la caridad_, mantener el

»

órden de la concordia, de la subordinacion, de la justicia, de

»

todas las virtudes; desarraigar de los corazones el hábito de los

»

desórdenes, de la rebelion, de todos los vicios; ocupar el lugar

»

de Dios,

y

ser el juez de las conciencias, el censor de las pasio–

»

nes, ved ahí lo que hace que el empleo del confesor sea uno de

»

los mas propios para

ma~tener

las costumbres,

y

por lo mismo

»

uno de los mas confor1nes al inte1 es público (2).

»

¡

Privilegío exepcional del Gatolicismo, que tenga la dicha de

contar entre los mejores apologistas de sus instituci_9nes

á

sus pro–

pios enemigos, cuando las ciegas pasiones no les embargan la ra–

~on!

Sean testigos de esta verdad los patriarcas de la impiedad

filosófica:

«

Nuestros Gobiernos modernos, dice

J. J.

Rousseau,

>>

deben sin duda al Cristianismo su autoridad mas sólida

y

sus

»

revoluciones menos frecuentes, á las cuales ha hecho menos

»

sanguinarias, si acaso suceden. Esto se prueba por los hechos,

y

»

no hay mas que compararlos con los Gobiernos antiguos. La Re–

>>

ligion mejor conocida, alejando el fanatismo, ha suavizado aun

>

mas las costumbres cristianas. Este cambio no es, no, obra de

»

las letras; porque allí donde han brillado, no pcJr esto ha sido

'' mas respetada la humanidad. Las crueldades de los Atenienses

»

y

de los Egípcios, de los Emperadores romanos y de los Chinos,

(i)

Historia filosófica,

t.

JI, edicion de

Gin ebra , - (2)

Vease

~

Nonoüe,

Diccio–

nario

anti~losófico

1

art.

Con{esion,