el Evangelio de San
Luca~
se emplea la palall'a griega
rnetanoia
traducida en la Biblia vulgata
pren'itentia.,
para expresar una peni–
tencia dolorosa? practicada en la ceniza y en el cilicio :
«
Mucho
»
tiempo hace (decía Jesucristo) que estas ciudades hubieran he–
»
cho penitencia cubiertas de cilicio
y
yaciendo sobre la ce–
»
niza (1). )} Tambien se hacia aplicacion de la misma voz griega
á la .penitencia en el relato
de
la conversion de los .Ninivitas, de
que todos tenemos noticia :
Quía pcenitentiam. e.gerunt :
y por
cierto, que esta no se limitaba
á
la simple qesacion de los crímenes.
El santo Job abrazaba las tres partes de ]a Penitencia, confesion,
dolor y satisfaccion, cuando decia :
Yo me' acuso
á
mí
mismo,
y
hago penitencia envuelto
en
polvo
y/
ceni%a
(2). Los Hebreos enten–
dían la Penitencia como ·nosotros, acompañada de contricion; en–
mienda
y
sacrificios satisfactorios;
y
es preciso no haber leido las
· pateticas exortaciones con que los Profetas en nomhre de Di0s se
dirigían
á
los culpable's para retrae'flos de la via de perdioion
é
ini–
quidad al sendero de la: justicia
y
santidad,,para poder asegurar con
esa incalíficabfe confianza, que la
penitentia
solo · importa la en–
mienda
ó
resipiscentia
..
El grito universal de los pueblos de todos
-los ,siglos
que~
como oímos en el primer capítulo, expresaron su
arrepentimiento por ·la confesion, el llanto
y
las austeridades cor- ·
porales, es la prueba mas perentoria de lo que signífica la Peniten–
cia, que solo puede desconocer el que rinnca ·haya pertenecido
á
esas sociedades de hombres racionales.
Sí nada hay de
repugnan~e
á
la sana razon en las tres partes del ·
sacramento de la Penitencia,
contrici~n,
proposito
ele la
enmienda
y
satisfaccion,
mucho menns
5e
hallará esa repugnancia en la
cornfe..
síon
ó
revelaóon de las propias miserias: Nada mas natural
y
racio–
nal, que un pobre enfermo· conocedor de sus dolencias tra,te de
evitar sus funestas consecuencias con presentarse ante un Medico
(i)
Luc., c. x, v. i3 : et Matth ., c.
XI,
v.
2L-
(2) Job, c.
x.I.u.