212 / 392
202-
tintamente
á
los Obispos y
á
los presbíteros escuchar las confe–
siones y absolver
a
esos penitentes' públicos; desde esta fecha esos
pecados fueron reservados
á
los Obispos, y tan ·solamente por dele-
.
gacion
ó
nuencia del Obispo era permitido
á,
los presbíteros absol-
ver
á
esos penitentes; cuya absolucion solo podía anticiparse al
cumplimiento del plazo de la penitencia por el peÍigro de muerte
y de persecucion,
ó
por ruego de los martíres, ó por arrepentí–
míen to extraordinario (1). Dió motivo
á
esa reserva'cion la nimia faci-
,
lidad, con que algunos présbi.teros ·absolvían yadmitían
á
la sagrada
comunion
á
esos penitentes públicos antes de haber trascurrido el
pla,zo de la penitencia,.de lo que daba
sentid~s
quejas San Cipriano
·á
los mismos presbíteros yal Papa San Cornelio (2). Esto no embar–
gante en está misma epoca los otros pecadores hacian su confesion
secreta
y
recibían inmediatamente la absolucion de los Sacerdotes
antes de cumplir su penitencia privada, como consta del mismo
San Cipriano.(3).
Claro es, que el peso exorbitanto del Episcopado, con la sobrecarga
indivisible de las confesiones de los pecadores ,mas criminales debía
de hacerse insoportable muy luego,
y
debia reclamar una pronta
inodificacion de esa. disciplina. Nuevas circunstancias vinieron
á
hacer mas apremiante esa medida. Con motivo de la persecucion
de Decio emperador, que por los años de 250 s.e babia encarnizado
contra los Cristianos, muchos fieles, que habían cometido la co–
bardía de renegar de su fe
á
presencia , de los· verdugos, se arre·–
pentian en la mayor parte casi inmediatamente de una apostasía
que solo el temor de los suplicios babia podido arrancarles. Aumen–
taba este número de penitentes la desercion de otros muchos, del
cisma de Novaciano, que babia queridó invadir y escalar la santa
Sede de San Pedro, derribando
al
Santo Pontífice Cornelio, y al-
(i)
Veanse
á
Natal Alej.,
Hist. ecclesiast.,
sec. 3, disert.
IX,
t. IV :
y
á
Morino,
De Pcenit.,
lib. III, c.
Jll. -
(2) Epist. 9, U , 1.2, 52 et 54. -
(3)
Lib.
De Lapsis,
et
Ep.
52,
etc.