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V
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TRATADO oumTO
faltas de algun
1
uclas,
ni.seles da licencia para ser fiscales de vidas
agenas, ni para andar como perros ventores oliendo lo que el otro
hace, y cómo vive, para sacarlo de rastrn; que eso no es oficio de
.
.
.
caridad, ni de hermano, sino de demoni·o. Los superiores , como lo
era san Pedro, quiere Dios que huelan las culpas mi1cho antes que
se hagan, despiertos.sin cavilaciones pmdentes, sin astucias y vigi–
lantes, sin juicio, sin sospechas , sin malicias, inquiriendo, y pro–
curando saber, no en particular, sino en comun, ·y con prudencia
y '
recato, cómo viven sus súbditos, ó súbditas, dónde van, en qué
andan, con quiéú conversan, qué hacen, velando él mientras duer–
men ellos, y no cumple con cerrarse en · su aposento ,
ú
oratorio;
y
darse
á
Ja oracion, encomendándolos
á
Dios ,
y
buscando su paz
.Yla ·quietud de su alma ; obligacion tiéne de dejar el. repos9, y sa–
lir fuera de él
á
mira1· por su república, comuni<lad,
ó
casa, no
para corregirles judicialmente (que eso no se puede hacer sin que
preceda infamia) ni para pasar del recato
á
Ja sospecha, ni de la
provide~cia
á
la malicia,
íü.
andar
á
caza ,
y
á
ojeo de culpas en
· personas
qu~·
proceden bien, sino para corregirlos paternalmente en
secreto,. y ,con caridad' aunque sea de pecados veni·ales, si "son muy
frecuentes, pues las faltas ligeras de los súbdítos, suelen ser culpa
grave en el superior ·; si las disimula
y
pasa por ellas ' con daiio
y
cJesá.édito de su. comunidad ó-familia.
Y
porque no hay cosa tan
delicatlá, ni que más tient9 ·pida, para no esceder,, que el avisar
ó
' coiTegir·'pecados agenos; pues uua palabra desmandada,.
ó
inadver–
tida, suele impedir el efocto de la correccion
y
enmienda,
y
.aun
m.andar al corregido, com? el barbero al enfermo , cuando no hiere
·
c.ontiento la vena ,
y
lastima al nervio;
y
es menester que el su–
perior,
ó
el particular mire. l<;> que
di.ce,
y
á
qui~n
lo dice,
y
cuán–
do,
y
cómo lo dice, llevando
Ja
sonda de Ja prudencia en la mano,
·
p~ra
conocer el fondo de cada mio,
y
el
pe.sode la discrecion, para
pesar· las
·palabr~s
que ha de d.eci1", porque no séan tan desabridas
· que ilo teágan .su punto
y
grano .de sal ; la razon es que corrijan,
y
ño irrite't1,. ni
afr~nten,
medidas con la caridad, estado
y
suerte
de
la
·persona que
s~desea
corregir, que no todas son igualmente sufridas,.
nj las 'culpas
lle
un mismo 'tamafío ·; esperando el tiempo,
y
la sa-