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DE LA. S_A.TlSl'A.CCION VOLUNTAIUA.
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hecho haber llorado yo un rato
á
mi madre muerta, que
á
m~
me
llora 'tantos años, etc. , no se ria, ni haga burla de mí, sino antes
con mucha caridad, llore
y
duélase .de mis culp·as,
y
alcánceme
perdon de ellas. Sea, pues, la conclusion de esta materia, lo que
dice Séneca (1): que si lo que Dios ha ordenado,
y
se puede re–
mediar con lágrimas, lloremos todos de noche
y
de dia ; pero si no,
que cese el dolor , pues se padece en vano ,
y
es gran cordma ha–
cer buen rostro
á
los males, cuando por afligirse
y
congojarse no
han de tener remedio:
y
tú procura, recibir esta,
y
las demas pe–
nalidades, persecuciones, trabajos , tentacionei:; y enfel'medades di–
chas en descuento de tus pecados,
y
serán mas satisfactorias que
los ayunos
y
penitencias,
y
que el fuego del purga torio. l\iercedes
son de Dios, no castigo; regalo, no trabajo ; indulgencia, no .pe·
nitencia, aunque se hagan como tal con la paciencia.
(1) Ad lVIarlian.