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DrA

veni

solvere

'

seJ

aaimpJere.

Amen quippe dico vobi.r

,

donec

tranreat ccelum

e

terra' jota

unum

,

aut unus apex non prce–

teribit d lege, don,ec omnia fiant.

Qui

ergo sotverit tmum de man–

datis i.rtis minimis

,

S

docuer'it

sic homine.r, minimus vocabitur

in

Regno Ccelorum, qui autem

fecerit

,

8

docuerit

,

hic mag–

nu.r vocabitur in Regno Cce–

lorum.

~

X I.

369·

'··¡

la L-ey ,

ó

los Profetas : no he venido

á dispensarme, sino á cumpli r. En ·

verdad

os

aseguro, que primero

fal~

tarán el Cielo, y la tierra , que una

letra,

ó

ápice de lo que está escrito

en la Ley, hasta que todo

se

cumpla.

El

que quebrante, pues, uno de sus

menores

precepto.~

, y enseñe

á

que

así lo hagan los hombres , se llamará

mínimo en el Reyno de los Cielos;

pero el que los observe, y enseñe, se

dirá grande en el

mismo R.eyno

de

los Cielos.

MEDIT ACION.

De la conversion verdadera.

'

P U N T O

P R I M E R O.

C Jns idera q

1e

no hay cosa mas

ord

inar~a

qne con–

versiones aparentes, y acaso tampoco la

h.ay

mas rara

que una conversion verdadera. Gran prue

ba

SQn

de esta

verd:1d las freqüentes recaidas. Conoce uno que es pe–

cador , confiesa su iniquidad , acúsase de sus culpas ;

~pero

de testa Íntimamente sus

pecados~

El espíritu está humi–

llado ;

~pero

está igualmente contrito

el

corazon

~

Si

consistiera la verdadera

conversior~ .

en declarar sns

m~ldades

, en reconocer sus desaciertos ,

y

en sentir

al–

g·ma displicencia, algun dolor de sus faltas , muchos es–

tarian convertidos, que en medio de todo esto mueren

impenitentes. Judas reconoció,

y

confesó su pecatlo, An-

tiocho lloró los sllyos, y ni uno ni otro se convirtiéron.

· '

Los mas se confiesan en !as principales fiestas ;

¿

pero

quán~

JOS

se convierten en

ellas~

'

Es necesaria la conversion del espíritLl, es

indispensa~

ble la convcrsion del corazon: sin esto no hay ccnver–

sion verdadera. Es menester mudar totalmente de ideas,

de principios,

y

de motivos. Hallabas antes razones de

equidad , de necesidad, de congruencia para esos contra·

Aa:t

tos