![Show Menu](styles/mobile-menu.png)
![Page Background](./../common/page-substrates/page0385.jpg)
D I A
X
x·r.
3
7
¡'
principios del Chtistianis
11:),
ta~11
;1o::o se habla sino segun
las máximas , y las verd.des de la Religion.
Es de admirar q·1e se
pa
iezcan tantas equivocaciones
en
materia de conversion , siendo aú que no hay cosa n1as
visible , que las señales q·te la caracterizan. No solo se tie–
ne horror al pecado ; se tiene por lo ménos otro tan'to
á
las ocasiones de pecar. No solo se huye de la culpa,
sino del lngar,
y
de b persona que sirvió de tentacion.
No solo se destierra el jugador del juego, pero aun de
la casa donde se juega; porque, desengañémonos,
el
que
solo se convierte
á
1nedias, no está verdaderamente con..
vertido.
~Quieres
ver un perfecto retrato de una verdadera con·
version ? Pues pon los ojos en la Magdalena. Detesta sus
culpas;
y
como el n1otivo de su dolor es
el
amor de su
Dios , no guarda medidas ;
y
así se la perdonan todos sus _
pecados , porque amó mucho. No se avergonzó de ser
pecadora ; pero se avergüenza- mucho ménos de parecer
arrepentida. Arrójase
á
los pies del Salvador en la misma
sala del convite : no busca ocasion de que no la vean,
antes quiere en ienda todo
el
n1undo que está ya conver–
tida. Es gran e su confusion; pero es mucho 1nayor su
resolucion,
y
su aliento.
Y
despues de este paso, ¡qué
vida
fu~
la suya! ¡Qué perseverancia en ella!
Ya no se aparta 1na.s- del lado de Jesu-Christo
:
mira
con horror al 1nundo, y desea que
el
mundo la mi re con
horror á ella. Su devocion 'no está · pendiente de !a pros–
peridad; en todos
ti
empos es su fervor inalterable. Sigue
al Salvador no solo hasta el Calvario , sino hasta
el
Se–
pulcro. Tanto excitan su amor las ignominias q11e
Chris~
to padece, con1o los milagros que hace. ¡Qué deseo!
¡
Q11é
ardor! ¡Qué ansia por hurtar , si pudiera, el Cuerpo de
tsu
Divino Maestro despues de sepultado!
Ni
la enonne,
y pesadJ. piedra del sepulcro ;
ni
el sello del Príncipe ;
ni
la
Compañía de Soldados que le guardaban son capaces de
templar su fervor , de desalentar su animosidad. Así pien..
sa ,
así obra , así
se
muestra sien1pre una n1isma alma
verdaderamente convertida. ConcLlyamos de
aq ~lÍ,
q·Je
Aaa
2
hay