CAPITULO XX.
.
453.
CAPITULO
xx.
Manda Dios al P ropheta que ande desnudo
y
ducalzo
,
anunciando
de este . modo el cautivuio de
los de
Egypt
a
y
de
Ethidpia
:
con
Jo
que qued aria desvanecida
/11,
confianza que ponia en ellos _el Pue–
blo de
Dias.
1
In
anno
quo
ingressus
est Thar than i fjl Azotum , cum
m isisset eum Sargon Ref{ As–
syriorum , et pugnasset contra
Azo tum , et cepisset earn:
2
·
In
tempore
illo
locutus
es t
1
D ominus in ma nu Isa!ae
fi–
li i
Amos , dicens : Vade , et sol–
ve saccum de lumbis
tuis , et
calceamenta tua tolle de pedi–
bus tuis. Et fecit sic , vadens
nud us · et discalceatus.
3
Et d ixit Dominus : Si cut
ambulavit servus meus · Isa!as
nudus et discakeatus ,
tfium
an norum signum et portentum
erit super A Egyptum et super
AEthiopiam:
4
Sic minabit Rex Assyrio–
rum captivitatem AEgypti , et
•
Es te era nom
.,,. de un General del
R ey S.:: naq ueri b.
1v .
~·XVIII.
r 7.
'.l
L lamado t ambien Senaquerib , el
qua! tuvo has t a siete nombres , como di–
ee S. GERONYMo.
3
Esra era una Satrapfa o Gobierno
de l0s Philis theos.
4
Es to aca eci6 al fin det afio
IJ·
o
al- p rin ci pio de!
14.
de! reyoado de Eze-
qolas .
.
R eg.
xv 111.
13.
s
L a tunica pobre
y
as pera , de que
so li an ir vestidos los Prophe tas.
6
C on sola la ropa inte rior. As! se
cree
que
and uvo t res d ias , figuran do los
tres afi os de gue rras
y
de calamidades que
habia de padecer el E gypro
y
la E rhi6- .
1
En
el aiio que entro Thar·
than
1
en Azoto, quando le envio
Sargon
z
Rey de los Assy dos,
y
peleo contra Azoto
s , _
y
la
tomo
4:
•
2
En aquel tiempo hablo el
Senor por mano de Isaias hijo
de Amos, diciendo: Ve,
y
suel–
ta~l
saco de tus lomos
s
, y qui–
ta
el calzado de tus
p
·es. E hi–
zolo as.I., yendo de1111udo
6
y des–
calzo.
3 Y
d
ixo elSenor:
A
la
ma–
nera que
Isa.I.asmi siervo an-–
duvo desnudo y descalzo , sera
sefial
y pronostico
7
de
tres
afios sob(£ Egy pto y sobre E–
thi6
pia:
4
Asi
llevara el Rey de los
Assyrios la cautividad de Egyp-
pia , contfodose •
dia por un afio , se–
gu1.1 estilo
p~1etico.
Los
Propbetas mu·
chas veces de p alabra,
y
otras por sefialei;
exteriores anunciaban lo que D ios amena–
z aba
con el fin de que hi ciese mayor
y
mas vi va impresion en los que los vefao .
Es cosa d igna de admiracion la puntual
obedi encia de este grand e homb re a las
ordenes del Sefior ; pues sieodo el
es–
ti.rpe R ea l , no tuvo di fic ultad
~d e
dexarse
ver en tal es tado , sufrie ndo pa r e llo gran1
rnbor
y
confusion ,
y
.fi.gurando la hu–
rn il dad de
J
es u Christo ,
y
su desnudez
en la C ruz. V ease S. GERoNYMO.
7
D e la calamidad que padeceri E ....
gy pto
y
Ethiopia por esi;>acio de tres anos.