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LIBRO QUARTO DE LOS REYES.
14 · Qui ait : Comprehendite
eos vivos. Quos cum compre–
hendissent vivos , iugulaverunt
eos in cistern·a iuxta cameram
quadraginta duos viros , et non
reliquit ex eis quemquam.
1
5
Cumque
abiisset
inde,
invenit Ionadab filium Rechab
in occursum sibi , et benedixit
ei. Et <ait ad eum: ¿N!Jmquid
est cor tuumt-reétum , sicut cor
meum cum • corde tuo ? Et ait
Ionadab : Est. Si est , inquit,
da manum tuam. Qui dedit ei
manum suam. At ille levavit
eum ad se in currum,
16
Dixitque ad eum: Veni me–
cum, et vide zelum meum pro Do–
mino. Et impositum in curru suo
17
Duxit in Samariam. Et
percussit
omnes
qui
reliqui
fuerant
e Achab
in Samaria
nsque ad unum , iu ta verbum
Domini quod
locutus est per
Eliam.
18 Congregavit ergo
Iehu
omnem Populum , e
dixit ad
eos : Achab coluit Baal parum,
ego autem colam eum ,amplius•.
19 Nunc igitur omnes pro–
piletas Baal , et universos ser-
• Como esto's Príncipes estaban énla–
zados con la casa de Acáb por Athalía,
Dios Jos abandonó a aquel que debía exe–
~utar
IUS
órdenes contra esta casa.
• Este era
)lO
hombre muy estimado'
por su virtud. Jehú quiso empeñarle en
$US
intereses , le dió muestras particulares
de amisr:¡,d , y llevóle consigo para que–
fuese testigo de su zelo por la honra y
verd~dero
culto del Señor. Este Jonadáb,
. <.!Ue descendía de Jetbro suegro de Moy-
6és , y de la familia de los Cinéos ,
es
el
R
IIJ.Rt¿U111XVI.
JI•
14
Jehú dixo : Tomádmclos
vivos. Y habiéndolos to.mado vi–
vos , los degollaron en una cis–
terna cerca de la cabaña a qua–
renta
y
dos hombres , y no de–
xó nin·guno de ellos
1 •
.
1
5 Y
habiendo pasado de
allí , halló a
J
onadáb • hijo de
Recáb que le venia al encuentro,
y
saludóle. Y díxole : ¿ Es rec–
to tu corazon , como lo es el
mio con el tuyo? Y respondió
J onadáb : Lo es. Si lo es , re–
plicó, dame .tu mano.. Y él le
dió su mano.
Y
Jehú le hizo
su~
bir en su carro ,
16 Y. díxole: Ven conmigo,
y
verás mi zelo por el Señor. Y
sentado sobre su carro
17
I.levóle a Samaria. E hizo
quitar la vida a todos los que
ha-
' bian quedado de Acáb en Samaria
sin dexar uno , conforme a la pa–
labra que el Señor había pronun–
ciado por Elías.
18
Juntó pues Jehú todo el
Pueblo ,
y
díxoles : Acáb honró
poco a Baal ; pero yo le honraré
mucho mas
3,
19 Ahora pues convocad a
mi presencia todos.los prophetas
/
que instituyó el extraordinario método
de vida de los Recabitas. Véase en los
Jueces
1.
16.
}EREM. XXXV.
6. Y
Ü
di6
la mmzo
en señal de amistad.
3
Es digno de la mayor recomenda–
don el zelo que mues1ra este Rey contra
el sacrílego culto de Baal; pero la liccion
y
mentira de que
se
valió para poner en
execucion lo que tenia meditado , no pue–
den excusarse, ni ménos imitarse. Así
SAl!
AcusTIN , quien llama
impía
esta liccion,
porque simulaba en ella la idolatría.