CAPITULO I.
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Et haec scribimus vobis
ut gaudeatis , et gaud ium ve-
strum sit plenum.
.
5 Et haec est annuntiatio
quam a udivirnus ab eo, et an–
nuntiamus vobis: Quoniam Deus
lux est , et tenebrae in eo non
sunt ulla\'.
6 Si dixerimus quoniam
SO·'
cieta tem habemus cum eo, et
in tenebris ambulamus, mentí–
mur,
.et
veritatem
non facimus.
7 Si autem in luce ambula–
mus, sicut et
i
pse est in luce;
societa tem habcmus ad invi–
cem : et sanguis Iesu Christi
Filii eius emundat nos ab oro–
ni peccato.
8 Si
dixe~us quonian1~ec
catum non nabemus ; ipsi nos
sed ucimus , et veritas in nobis
non est.
4 Y estas cosas os escribimos
para que os goce is' , y vuestro
gozo sea cumplido.
5 Y esta es la nueva que oí–
mos de él m ismo, y que os an un–
ciamos a vosotros : Que Dios ·es
luz •,
y
no hay en él ningunas
tinieblas.
6 Si dixéremos que tenemos–
cOmunion con
él,
y
andamos
en
tinieblas
3 ,
mentimos ,
y
no ha–
cemos la verdad.
7 Mas si a nda mos en la luz
4,
como él está tambien en la luz; te- .
nemas cornunion unos con otros
s:
~
la
sangre de J esu Christo
Sll
,
ijo nos lirnpía de todo peca:·
. o •.•
8 . Si dixéremos que no tene–
mos pecado;
nosotr~s- ~~os
nos
,engañarnos ', y
la~
no es–
tá en nosotros.
~,-.__¡
• De esta santa un ion , a
Ja
qual Dios
de un soto dia. Y a$f e1 que afirma qoe
miscricordiosamcnrc os ha llamado.
está limpio
y
puro de todo pecado , no
2
IoANN.
V III. 12 .
Dios es la luz en
carece de presuncion;
y
por consiguiente
sí mismo ; esto es ,
la
sabiduría , la ver-
peca en esto mismo que confiadamente
dad , la santt8ad
,
b Justicia: es tambien
afirma c_le sí. Q uando hablamos de peca-
la luz por respeto a nosotros ; quiere de-
dos
y
farras, que soñ
freqi~tes
aun· 'ell
ci r, el principio ,
la
regla
y
el modelo de
los
~smos
justos, se
enriend.enligeras o
··h
s:1biduría, verdad , santidad y justicia
ven~les.
l A
con. rn.
2.
S. AcosTIN
de
que hay en nosotros,
y
él nos comunica.
Nat. etgrat.
dice , que a excepcion de la
3
~¡
vivimos en el error
y
en el pe-
Vírgen Sama María , de la qua! por ha-
cado que destruye la vida del alma.
nor del Señor no quiere hablar ni una so-
4
El
es luz substtncial
y
divina , la
la~alabra
;
qua~d11
trata de pecado,
misma luz que ílusrra
y
alienta a Jos justos.
e:<C"epwada
)j"
~
e el Santo Doélor, si
s
Esto parece
qu~ e~
Jas.p~la~
a todos
1 '
m es·samos,
y
a todas las
bras del T. Gr.
x.o•H»r•cu exo.u•r
..
GCM.ll~
mugere
oras que ha habido se les hu-
"-~"
, todos participamos de su grac
hiera podido preguntar en el tiempo de
1no miembros de 'un. mismo cuerpo.
1\
su vida, si estaban sin pecado; por gran-
las
qu..1!es me ha p.1recido deber explicar
de
y
elevada que fuese su santidad , hu-
el sentido de
la
Vulgata. Otros lo ínter-:
hieran todos
y
todas respondido con es-
pretan ,
tmr:mos soch-dad rr:cfprota
c.onél.
us palabras de S.
JuAN:
Si di:t:fremos
que
6
Por medio del Baut1smo, de la pe-
110
tenemos pr:cado, nosotros mismos nos
nirencia
y
de la caridad.
1-Ir:úrn~or.
r.r.
engaiiamo.r...
ur.
Re....t:·
V.Jlf.
46.
11.
P n-
14·
1.
PETRI
1.
I9·
ralip.
vr. 36.
lsAJ. LXIV.
6.
Psnlm.
L .
7
Porque el ¡usto cae siete veces, o / 6.
R oman..
111.
23.
Proverb.
JCX.
9·
Be-
muchas veces en el dia:
y
no hay hom-
c./es. v rr.
21 .
C.oncil. Milr:vit.
Can. vr.
bre limpio sobre la tierra , ni aun el niño
Concii...
Tridnzt. Sess..vr.
Cnu.
_z.7.I.JI•.
Tom. II.
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