CAPI'rtJLO VI.
14 Dicens
Nisi benedi-
cens benedicam te, et multipli·
caos multi plicabo te.
15
Et sic longanimiter fe–
rens , adeptus est repromissio-
nem.
16 Homines enim per rfla–
iorem sui iurant: et omnis con–
troversiac eorum finis ad con–
:firrnationem est iu ramentum)
'7 In quo abundantius
vo~
lens Deus ostendere pollicita–
tionis beredibus immobilitatem
consilii sui , interposuit iusiu–
·randum.
18 Ut per duas res im–
rnobiles, quibus impossibile est
mentiri D eum , . fortissimum
solarium habeamus qui coofu–
gimus ad tenabdam propositam
spem:
19 Quam sicut ancboram ba–
bcmYs animae tutjm ac firmam,
et incedentem usque ad interio·
ra velaminis
:
20
Ubi praecursor pro no–
bis introivit lesus , secundum
ordinem Melchisedecb Pontifex
faél:us in aeternum.
14 D iciendo: éiertáttiente
'
bendiciendo te bendeciré, y
mul~
tiplicando te multiplicaré.
I
5 Y
así esperando con larga
paciencia • , alcanzó la prome•
sa.
I
6 Porque los hombres juran
por el que
es
mayor que ellos: y el
juramento
es
la mayor seguridad
para terminar sus contiendas '•
17 Por lo qua! querie.ndo
Dios mostrar mas cumplida–
mente a los herederos de
1~
promesa
la
inmutabilidad de su
consejo, interpuso juramento.
18 Para que por dos cosas
infalibles •
1
en las quales es im-
-..posible que Dios fal te , tenga•
mos un• poderosíslmo consuelo
los que nos refugiamos a alean•
zar la esperanza
propya~ta
s'
• 19 La qua! ·renellll!!ls como·
una áncora firme y segura del
ánima
6
,
y que penetra hasta las
cosas que están deoúo del velo
7:
20
En donde entró
J
esu§ pre·
cursor por nosotros
8
' ·,
consti–
tuido Pontífice eternamente
se·
gun el órden de Melc¡uisedecb,
~-.!.;
t
t .
Gr.
:
1.1.~V
,
ciertamente.
Ge~
s'
De loS
bi~nes
qrle rtos están
prom~
IU'S.
:xx
I r.
17.
Rom.
rv.
16.
G alat.
111.
tidos.
·
7 ·
9·
Es una cxpresion Hebréa , que quic-
• Que nos tiene asidos a Dios en me-
re decir: te bendeciré abundantemente; te
dio de las
te~¡¡su•
de esta:,.'ida ·, ca-
colmaré de bendiciones¡ ...•
mo sirve el .
ora para asegurar el na-
'1
Véasu Ja série de este suceso en él
vío. S.
THOMAS
LeEl.
I V.
G éllcsls
rx.
t6.
17. 18.
7
Que hace
quC
vivamos como po(
j
Los hombres, para confirmar
Ja
vet~
:mticipacion en el Cielo ; o que nos inrro::;
dad de
su~
promesas , acostumbran effi!
ducirá en el Cielo , figurado por el San-
p icar el juramento ;
y
Dios , acomodán-
tuario o
Stmfla Smzllorum
,
que estaba
dose
1
y
condescendiendo con la flaque-
mas allá del segundo velo. V éase
T HEO-
z:t.y condicion de los hombres , aunque
D ORBTO.
es la verdad misma ,
y
que sobre su pa-
1
D onde entr6 Jesus por sh Aseen-
labra debe ser creído , quiso no obstante
sion , para prepararnos
el
lugar que ha:..
:a~egurar
a Abl'aham con juramento
la
vtt~
mos de tener en él;
y
para ofrecera Dios,
dad
d~ ~ll
palabra.
como Pontífice nucsrro , los inéritcu de ns
<t
Su promesa
y
su juramento.
MutUte.
TnsoPH YLAGT<i.
Tom.
11.
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