CAPITULO IV.
4 Dixit enim in quodam lo–
co de die septima sic ' : Et re–
quievit Deus die septima ab om–
nibus operibus suis.
5 Et in isto rursum: Si in–
troibunt
in
requiem meam.
6 Quoniam ergo superest
introire quosdam in íllam , et
ii quibus prioribus annuntia–
tum est, non introlerunt propter
incred ulitatem:
7
lterum terminat diem
quemdam, Hodie, in D avid di–
cendo, post tantum
temflDrls,
sicut supra diétum est ' : Ha–
die si vocem eius audieritis,
nolite obdurare corda vestra.
8 Nam si eis Iesus requiero
praestitisset, numquam de l!lia
loqueretur posdlac die:
9 ltaque relinquitur sabba–
tismus Populo Dei.
10
Qui enim i<Jigressus est
in requiem eius ; etiam ipse re–
quievit ab operibus suis , sicut
a suís Deus.
11
Festínemus ergo íngredí
in
illam requíem : ut ne in id–
ipsum quis incidat incredulita–
tis exemplum.
12
Vivus est enim sermo
•
Y
así puesto que Josué no
dió
un
verdadero descanso ,
queda~!
Pueblo de
·
Dios otro Sabatismo o grande Sábado, que
podemos ll,¡mar otro descanso. De cuya
voz usa el Apóstol, segun
el
estilo de Jos
l-lebréos con quienes hablaba. Y estC Sa_.
·
batismo es
ta
vida eterna , en la que Jos
bienaventurados tendrán un perfeCto des–
canso de los trabajos. El error de los Mi–
lenarios que se quiso apoyar en este tex–
to junto con el
Cap.
:z
1.
2.
del Apocal.
Dis;~~~ediD::jr:n~~;r:'rs"Mil~!~~:s!a
a Genu.
JI.
2 .
Tom.U.
4 Porque en cierto lugar di–
xo así del dia séptimo: Y reposó
Dios en el dia séptimo de todas
sus obras.
5 Y de nuevo allí mismo:
N o entrarán en mi reposo.
6 Pues porque aun resta que
algunos entre'! en él , y que a–
quellos a quien primero fué anun–
ciado , no entraron por su incre–
dulidad:
7
Determina de nuevo un
cierto dia, despues de tanto tiem–
po diciendo por D avid ,Hoy ,co–
mo queda dicho arriba: Si oye–
reis H oy la voz de él, no querais
endurecer vuestros corazones.
• 8
P~rque
si.Jesus les hubiera
dado el reposo, Jamas en adelan–
te hubiera hablado de otro dia :
_.. 9 Por lo qual'
qu~
el
sa–
batismo para el Pueblo"!ré Dios.
10
Porque el que ha entrado
en su reposo ; el mismo ha re–
posado tambien de sus obras , así
como Dios de las suyas •.
1
r Apresurémonos pues ' a
entrar en aquel reposo; para que
ninguno cayga
jama~
en igual
exe~plo
de incredulidad
4 •
1 2
Porque ]apalabra de
Dios
"
Como si dixera .-sí como Dios cc–
s6
el dia
sépt~
de toda obra externa,
de la misma manera en aquel grande Sába–
do o eterno reposo, hechos todos espiri–
tuales , descansarémos de toda obra
ex–
terna
y
carnal. Esta es la exposicion de
los SS.
Pl'.
3
MS.
P ues aprisadémomos.
Por me–
dio de la fe
y
de las buenas obras.
•
Porque
nin~uno
por su increduli–
dad quede cxdUido del eterno reposo,
como Jo fueron los
Judíos
por la suya de,
la tierra de promision. S. TnoM.
L~fl.
tV.
b Supra/JI . 1·
Cccc.
2