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48.8 EPIST.I. DE S. PABLO A LOS THESALON ICENSES.

tis, quia dies D omini, sicut fur

in · noéte , ita veniet.

3· Cum enim dixerint pax

et secaritas , tune repentinus eís

superveniet ínteritus , sicut do–

lor in utero habenti, et non ef–

fugient.

4 Vos autem, fra tres , non

estis in tenebris, ut vos dies

iila , tamqua m fu r comprehen–

dat :

5 Omnes ením vos filii lu–

cis estis et fili i diei : non su–

mus noétis , neque tenebra–

rum.

6 Igitur non dormiamus sic–

ut et ceteri , sed vigilemos

~:e

sobrii simus.

7 Qui en im dormiunt, no–

éte dormiunt: et qui ebrii sunt,

noéte «.2rii sunt.

'

\ 8 Nos autem, qui diei su–

mus, sobrii simus

" ,

induti lo–

r icam fidei et charitatis , et ga-

leam spem salutis :

·

9 Quoniam non posuit nos

D eus in iram , sed in acquisi–

tionem salutis per Dominum no–

o

z Quando no se le espera. MA

TTR.

xxrv.

43 ·

L uc.

x 11.

39·

~

Quando los malos estarán en ma–

yor tranquilidad

:9

descuido.

·

3

Por el juicio de .h.los que los con-

denará.

4

MS.

A sobruuienta.

r

s

Porque el decreto de condenacion

que se pronunciará , será irrevocable.

"'

6

Porque participais de las verdades

eternas que os ha comunicado Jesu Chris–

to.

7"

T .

Gr.

U,of , hiJos.

El Apóstol lla–

~na

tinieblas

o

uoche

a la ignorancia de la

verdad , la incredulidad

y

la vida licen–

ciosa ;

(fia

o

luz

,

la fe , la vida pura e

a Isniru

Lix.

X7·

Ephes.

vi.

14.

x¡ ...

beis bien, que el dia del Señor ven–

drá , como un Jad ron de noche '.

3 P orque .quando dirán • paz

y

seguridad, entónces les sobre–

cogerá una muerte

3

repentina

4,

como el dolor a la muger que es–

tá encinta ,

y

no escaparán

s.

4 Mas vosotros , hermanos,

no estais en tinieblas

6 ,

de modo

que aquel dia os sorprehenda,

como ladron :

5 Porque· todos vosotros sois

h ijos de luz e hijos de d ia: noso–

tros no lo somos de noche, ni de

tinieblas.

6 Pues no durmamos como

los otros, mas velemos

y

viva–

me¡_~

con templan;z.a.

7 Porque

Jo~

qoe duwrmen, de

noche duermen:

y

los que se em–

briagan, de noclle se embriagan.

8 Mas r¡_asotros , que somos

del dia

7 ,

seamos sóbrios, vesL–

dos de cota de fe y de caridad ,

.y

por yelmo esperanza de salud:

9 Porque no nos ha pues–

to Dios para ira

8 ,

sino para

alcanzar la salud por nuestro

inocente.

L a embriaguez

.f

el suei'ío,

es

la vida del pecador que vive en

el

olvido

de Dios ,

y

que tiene el cor.tzon embria–

gado en los placeres

y

vanos contentos

del mundo.

1.:a

1.Jigilmtcia

.f

!.t

tonpl.m–

.za

,

es el estado de un vcrd:1dero Chris–

,tiano , que esperando conrínu:unenre

aquel último fin

y

d~a,

arregla roda su

vida sobre la Ley de Dios ,

y

solo usa de

las criaturas , en quanro lo pide

la

nece·

sidad. S. AucusT.

1'11

Psalm. cx:r.r

1 ."11.

S.

8

Para condenarnos

y

destinarnos al

fuego eterno, sino para que por los méritos

de Jesu

Chr~sto

consigb.nlos la vida eter–

na , que tiene

prepar~da

para los justos:

que perseveran en gracia.