CAPITULO XVI.
3
Salutate • Priscam et Aquí–
lam adiutores
meo.~
in Christo
lesu:
4
Qui pro anima mea suas
cervices supposuerunt : quibus
n on solus ego gratias ago, sed et
c unétae Ecclesiae Gentium;
5
E t domesticam
Eccl~siam
eorum. Salutate Epaenetum di–
leétum mihi , qui est primitivús
Asiae i.o Christo.'
6
Salutate Mariam, quae mul–
tum laboravit in
vobis.
7
Salutate Andronicum et
l uniam, cognatos , et concapti–
vos meos : qu i sunt nobiles in
Apostolis , qui et ante me fue–
runt in Chrisro.
8
Salutate Ampliatum Jli–
le.étissimum mih} in D omi-
no.
9
Salutate U rbanum adiuto–
rem nostrum in C l9risto l esu , et
Stachyn dileétum meum.
3
Saludad ,a Prisca '
y
a
Aq.uila , que trabajaron conmi go
en
J
esu Christo • :
4
Los que por mi vida expu–
sieron sus
cabez.as3 :
y no lo agra–
dez.coyo solo, mas tambien to–
das las Iglesias de las Gentes •;
5 Y
del mismo modo a la Igle–
sia, que está en su casa •. Saludad
a Epenéto mi
ami~o,
que es las
primicias del Asia en Christo.•
6
Sa ludad a María , la que
trabajó mucho entre vosotros
7 •
7
Saludad a Andrónico y a
Junia, mis parientes
8 ,
y
cauti–
vos conmigo : los quales se han
señalado en el Apostolado
9,
y fue–
f 9Jl
ántes que yo en Christo.
8
Saludad a Ampliato
10
,
a
quien amo entrañablemente en el
J
Señor.
9
Saludad a U
rbaP.ól, que .
ha trabajado conmigo en
J
esu
Christo, y a mi amado Estachys.
t.,..-.~
'
T . Gr.
'ñ~l1xtM«-v ,
Priscilla.
s Por el servicio de Jesu Christo.
3
D e estos dos consortes se hace meo–
cien en los
H echos de los Ap6stoles Cap.
;rvr r
r. 2. 18. N o se sabe precisamente
en qué oc:tsion expusieron sus vidas por
salvar la del Apóstol. Puede ser que fue–
se en la que acabamos de citar , o en
la
que se refiere en los mismos
H fchos Cap.
:x
rx .
puesto que parece cierJo que en es–
tas dos ocasiones acompañaban a S. Pablo.
4
Que han oído hablar de esta accion
tan generosa
y
tan caritativa.
s
A
todos los fieles que se congregan
en su casa para la fraccion del pan ; para
oir
la
pal-abra de D ios
y
para orar. Los
Christianos no tcni.m Tcmplos públicos,
y
acudian a casas particulares , donde ha–
bia mnyor comodidad para los exercicios
de piedad
y
de Religion.
6
T. Gr.
-riír d.x«l«r , de la Acaya.
"
Alfor. xvr r r.
ti.
Tom. U.
...
Que fué uno de loS primeros que abraza–
ron la fe de
J
csu Christo en la Asia me–
nor.
7
T . Gr. tir
~p."ir
,
entre nosotros
,
o
para 3\isrirnos.
8
Hebréos ,
y
de
la
misma Tribu
de
Bcnjamin . .Es de creer que fuesen marido
y
muger. Sus nombres , o fueron formados
de los que ánres tenian , o les fueron pues
4
tos de nuevo despues
.~
su conversion.
N o se sabe en q:.)é
tiem~
ni en qué lugar
estuvieron presos con S. Pablo , porque
no se hace de ello mencion en los
H echos
de los Apóstoles.
§¡119
Los quales no solo abrazaron
la fe
de Jcsu Cluisto :intes que yo, sino que
han procur,tdo convertir a otros; de ma–
nera que se han hecho célebres
y
señala–
dos entre los operarios del Evangelio.
.1o
T.
Gr.
l.~?t'Ai"-'
Th
l.,t«n11rJr p.v , 11
Amplias mi amado.
I.i