Table of Contents Table of Contents
Previous Page  188 / 664 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 188 / 664 Next Page
Page Background

e

SAN MATHE O.

CAPI1 ULO XXIV.

.Anuncia el S eiiot· la rul11a del templo. D a a sus disclpulos tm ·aviso

genet·al de lo que sucedet·ia eu el mundo

,

durante

la pt·omulgnciotJ

del Eva11gelio

,

hrtsta el fin del mismo 11nmdo. Avisa lo que debe–

~hacer

los vet·dade>"Os fieles

,

para

110

ser engaiindos de los fa/–

\

S~S,)'eh~

encarga

,

que estén siempre eo vela

pat·a

que

110

les coja de

SOr]!•

.sa. la segund.

~~nida

del

Se~lor.

I

Et

a

egressus lesos 'Ce

templo , ibat. Et accesserunt di–

scipuli eius , ut ostenderent ei

aedificationes templi.

e

·

2

Ipse autem respondens di–

xit .jllis : ¿Videtis haec omnia?

Amen dico vobis

b

,

non relin–

quetur hic lapis super lapidem,

qui non destruatur.

3

Sedente autem eo super

montem Oliveti, accesserunt ad

eum discipuli secreto, dicentes:

D ie nobis, ¿quando haec erunt?

¿et quod signum adventus tui, et

consummationis saeculi ?

"

4 Et

e

respondens Iesus, di–

xit eis : Videte ne quis vos se–

ducat :

1.

Sus discípulos

;

esto es

,

uno de sus

8iscípulos ,

:

MA.Rc.

XIII.

1.

el plural por

el

~ingular.

2

Los discípulos del Señor sorprendi–

Cos de las palabras de Jesu

Chrisro ,

y

ser

brc todo de

b.

prediccion que acabal:c de

hacer , que Jerusalcm seria dcstruída

y

abandonada ; crey,.ron sin duda , que ha–

ciéndole observar

t1

magnificencia

y

ri–

queza del T emplo podría moverse a com–

pasion ,

y

mudar la sentencia que había

pronunciado. Mas

ni

el~ro, ~¡

la plata,

ni

el cedro , ui los máonoles

1

:

preciosos

eran

capaces de

mover

a aque -; que

era

el

1 '

Y

habiendo salido J esus

del templo, se retiraba. Y llegá–

ronse a él sus discípulos ', para

mostrarle las obras del templo.

2

Mas él

les

respondió di–

ciendo: ¿Veis todo esto? En ver–

dad os digo, que no quedará aquí

piedra sobre piedra , que no sea

derribada '.

3 Y estandd' sentado en el

monte del Oli var , llegáronse a él

sus discípulos aparte, y dixéronle:

D inos, ¿quándo serán estas cosas\5

¿y qué seña l parecerá en tu veni–

da' ,y en la consumacion del siglo?

4 Y respondiendo Jesus , les

dixo : ·Guardáos que no os en–

gañe alguno :

l'

Criador de Cielos

y

tierra. Y así les rcspon–

di6 ,

que

1w

qut>d.trir~

pit!drn .sobr1•pit•dra.

(!/ '

J

T.

Gr.

Tii~

ñ'

:m.e1t11•"-' ,

de tu

pre–

sencia;

y

&sí

llama

siempre

el texto

Grie–

go

la venida

dd

Señor.

Los discípulos

creyeron , que

el

mundo se habi3 de aca–

bar quando Jerus.tlem fuese dcstruída ;

y

así prcgun«m juntamente por lo uno

y

por lo otro :

y

el Señor les responde so–

bre entrambas cosas , dando a entender

que

sucederían no a un mismo tiempo ,

si–

no en diversos ; previniéndolos

y

IOrriti–

dndolos

contra

todos Jos

males que ll.l–

bim

de so}?revcnir.

n Mtlrc.X.ILI.

1 .

Luc.zxi.

b Luc. xrx.44·

&

Ephcs.v.6.

Colos~

rr.tS.

l..