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axioma: No se han de negar la cosas claras por algunas o cura'.
Dio estú en todas las co as existentes, porque
10
todas ex–
t:in 'ujeta it ·u palier;
2~
todas e tán presentes
á
su entendi–
mi 'uta
é
intuicion iillplieísima; 3? da. el ser
tÍ
todas las co. as
y
la eúnser a. Algunos di en que Dios tambien existe en los es-
' pacíos imaginarios lo cual
va.letanto como decir que Dios exi. te
en
la
nad,t tuda yez que el espacio imaginario es una ilusion do
lit
imilginacion. Seme:hmte opinion es inadmisible.
XVI.
Atributos relativos.
EL
EK'rEXDUITElXTO y
J.A CIEN lA.
D'E
DIO
El entendimiento
y
la íoluntad pueden .considerar e como
atributo.' absoluto,
(¡
rel,tpivos. Dio es tilla Inteligencia supre–
llla:
'au::;u innnita, de todas las existencias. En el
entenmmie.p.toLii\'ino no l1a)7 iJeas distintas del mismo entendimiento, sino qU(l
la
illisma eseucia divina
ha.celas veces Je idea única
y
Ulli 1'1';,1 1,
eOIl
respecto
,í,
tollas los objetos conocidos por el cntendil..Oielll')
Jiriuo.
'
La ciencia .de Dios es la cieueia de todo lo que puede abt'l'–
. c. ( o;,;e diferencia de su inteligencü\.) La ciencia Cle Dios es
infinita
y
por e, to no e,' . uce iva, ui di 'cursi
va,
ni
apoyada en ht
fé.
Dio. al conocer e
á
si mi mo, conoce todo sus efecto, lJUe¡-;
el
conocimieuto compren ivo ele la. can a; envuelve el conoci–
mieuto de los efectos;
y
las existencias finitas proceden de la
esencia divina, como de causa eje.mplar
y
tinal,
y
de la íolunta!l
Jh ina como de causa eficiente.
Los deistas, alguno racionalistas modernos, Tulio Ciecron
, . Damiron 'a everan que la divina presciencia olú se estielJLle
ú
las cosas que ban de suceder nece ariamente, p ro no
á,
la fu–
turas determinaciones de nuestra libertad. Lo. sociniano, el1.'C–
üan que Dios no conoce los futlul'os libres con ciencia cierta
:>i–
no
010
conjeturalmente. Estos errores fácilmente se di ¡pan al
con
id
rar que la ciencia de Dios no seria infinita, pue to qu'
puedo numeutarse¡ n Dios habría potenCialidad
y
di tinCiOD e::;–
turía nj 'to
á
mutacion, ,comenzando
ú
po eel' algo que no tenia
unte'. La presciencia de Dios es una mera ilusion de la imagina–
'ion pues no prevee
ó
preconoce las eosas futuras, sino qu
'Ve
.\'
conoce intuitivamente
en la pre encia.lidad de la ete.rnidad, la.'
cu 'a' qüo on la . ucecion del tiempo se r ealizan. A la manera,
lico 'anto"l'omt1., que el que va por un camino no e
tÍ
aquelJ,).'