DE PHOCION,
II
mas
incontestablemente que nuestros ve–
cinos?
Mirad la pesadez de los Espartanos:
deliberaron dentro de un mes lo que les
precisaba haber executado hace quince dias.
A la ineapacidad de los Beocios solo igua–
la su misma presuncion. Creen tener de–
recho para gobernar la Grecia , por un so–
lo momento que tuvieron su dominio.
I
Phocidia con su Templo de Delfos se de–
tiene en un respeto tan ridículo como pro·
fundo por los Oráculos de su
A
polo. Co–
rintio está groseramente ocupada con
la
plata , y comercio que hace sobre los dos
mares. El resto de la Grecia no merece
el honor de ser nombrado; y si no le hubié–
ramos
instruido
un poco , todo estaria aun
en Ja barbarie , que nuestros respetables
antepasados del tiempo de Teseo. Sin em–
bargo, yo no estoy contento con nuestras
ventajas :
me
parece que nuestros Magis–
trados no saben sacar partido de nuestras
buenas qualidades , y conozco , que
la
República , que debia gobernar imperiosa–
mente la Grecia , se destruye, y perece por
falta nuestra :. nada se nos esconde en
el
trato de gentes , y nada hacemos de lo
que debíamos hacer. ¿De qué nos sirven
nuestros
talento;? Será preciso -.. proponer
nuevas Leyes ,
ó
á lo menos corregir las
an-