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ENTRETENIMIENTOS
República con conmociones violentas , por–
que tiene mas vicios, que suponen una
oculta fuerza ,
y
soberbia en
el
alma. Te–
med esta pérfida calma : no está la verdad
en todos Jos corazones,
y
sí la mentira en
todas las bocas: no es
so"!·~mente
el vil in–
terés la regla de las acciones de los Ciu–
dadanos, sino tambien la alma de sus pen–
samientos. Vereis
á
los Magistrados po–
nerse mutuamente asechanzas. Vereis al
ambicioso infamar con calumnias ,
y
que–
rer p erder
á
sus competidores ; pero no le
vereis darse el mal rato de querer mejor
que ellos. En una palabra, los mas baxos
vicios han puesto los espíritus en un mor–
tal letargo , que no dexa esperanza de sa–
lud.
A estas palabras, querido Cleophanes,
que nos presentaban un retrato de nues–
tra situacion, cai.mos Aristias ,
y
yo en
una profunda consternacion : creimos oir
una sentencia de muerte contra auestra pa–
tria. Yo temblaba, viéndome en un abis·
mo sin salida, de donde no podia ser oi•
do ni de los Dioses , ni de los hombres.
Aun el mismo Phocion , como asustado
de la fiel pintura, que babia hecho de nues–
tros vicios, interrun1pió su
discurso ,
y
ba..
xando la vista , parecia que estaba sumer•
gido en algun lúgubre desvarío. Se ofrecian
mil