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B. PÉREZ GALD6s
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consecuencia, sin la
' ~onstancia
en amar una
fe aúgusta
y
venerable, por '
la
cual sómos es–
carnecidos.
-Todó /
eso es de
forma: al
fondo, al fondo
-djjo
Lantigua
COQ
illlpaciencia.-Usted de-
muestra
creer
que
su
religión
DO
es en lo mo·
ral superior
á
la mía. .
-Lo
es por la antigüedad
y
por la sencillez·
Cl'eo
fh'memente·que cuanto Dios
ha
revelado
al
ho~1;>re
está en
mi
ley.
Todo
lo
denlás
es
postizo. No aborrezco al cristianismo por falso
ni por malo, sino por cruel
é
inútil.
'>
A D.
Buenaventura
se
le vinieron
á
la boc!,
mil "argumentos terribles,
ábl'umadol'ss,
sin
réplica; pero se contuvo antes. de enunci{irlos,
y
llenándose
de paciencit\,' siguió escuchando.
«Hay
r azones
históricas
y
sociales-af:'íadió
el
hebreo, - razones
terribles,.
amigo
mío, para
que nuestra
abjuración sea
más deshonrosa
que la de
otro hombre cualquiera.•
D .
Buenaventura
dejó ver una sonrisa
de
desdén.
I
_ e
Además de
que
siento
un
instin tivo
amor
al
Dios de mis padres,
y
antipatía invencible
á
la inútil innovación cristiana.. .
:t
A D. Buenaventura se le acababa la
pa-
. .
C"lenCIQ.
cDéjeme usted
seguir.
Ad~más
de
es to, obe-