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Pero el gozo se le fué al pozo á nuestro amigo cuando se

presentó á sus compañe ros con este dinero, orgulloso comple–

tamente de su triunfo .

Contra lo que dijo Espronceda que:

• Siempre brilla ilustre el ven cedor •

fu é

r ecibido con una frialdad tan glacial la narracion de su

aventura, que por poco mas se le hiela la sangre en sus venas.

Sucedía lo que pasa muchas veces cuando los sentimiento s

del hombr e no es tan del todo pervertidos: que al ir á consumar

un hecho indigno se subleva su conciencia y concluye por re –

chazar el placer ó la fortuna que antes habia acariciado.

Y esto fué lo que pasó con nu estros j óv en es: sintieron repug–

nancia por su conduct a ante la r ealidad de los hechos y en vis ta

del o g rosero de la conquista.

El de mas edad de t odos, despues de un momento de silencio

asaz fastidioso para el conquistador, tomó la palabra para de–

cir:- Seria una indignidad utilizar ese dinero, y nosotros unos

miserables si continuáramos en esta vida.

- Y qué har é con él, contestóle el otro.

- Devolvér selo inmedia tamente á esa muj er, y que este he-

cho nos sirva de ej emplo para observar otra conducta en lo

sucesivo.

Y así se hizo, en efecto, presentándose todos en seguida al

Comité, quien los envió á los pocos días con una espedicion

que marchaba para la r evolucion.

Hoy es tos sugetos, son felices . D os de ellos se han casado y

son excelent es padres de familia, ocupando todos una posicion

disting uida.

Las fuerzas de infantería del gobierno de Batlle, en su mayor

parte, eran mercenarios italianos.

Hay varias anécdotas sucedidas entre ellos y las fuerzas re–

volucio narias, que se hi cieron populares por la parte cómica

que encierran .

Citar emos entre otras, aquell as de las persecuciones hechas

al ejército de Suarez al dia siguiente de la batalla de Severino

primero y dos días antes de la batalla del Sauce despues, y la

verificada a l ejército de Cas tro en las sierras de San Juan, que

narraremosjen el tomo II.

-No me ritmpa la chaqueta

!-Decia uno de los muchos