- 3I-
pamanta runa rurac=QUE HIZO AL HOM–
BRE DE TIERRA).
" ... xamas dexaua (los purun runa) la ley de ha–
zer sus oraciones al Dios del cielo pacha
camac
(cr ea–
dor del universo) . . . . .
jamas mesclaua
de cosas
de ydulatra y mentiras ni lo auia en este tiempo cino to–
do llano .
.
. . mira cristiano lector aprended de e¡sta
gente barbara q' aquella sombra de
conoser al criador
con la ley de Dios para su seruicio".
" .. , . . entre ellos (los auca runa) adoraron a Dios
y
criador como los antigos yndios . . . . . ''
Ag-reg·a mas
adelante: "
. . . .
no tenían guacas ydolos ni adora–
uan a las piedras, ni
al
sol, ni a la luna ni a las estrella ,
ni tenían templo cubierto cino fué
señalado un sitio
y
lugar le tenían como cosa grande daclonde hablaron con
Dios del cielo runa camac (cr e a do r
d el g
é
n e r o
h u m a n o )
y
aci los demonios se huyan dellos y no uuo
(hubo) tentación .
.
. "
E so de que no tuvieran templos cubiertos y más
bien lugares especiales ¿será indicio de civilización
asiática? Los persas tampoco tuvieron templos cu–
biertos sino sitios señalados para adorar al Ser Su–
premo.
Después de esto Felipe Guamán Poma de Ayala
sostiene que la idolatría entró en el antiguo Perú
con el r égimen, ya muy posterior, ele los Incas.
Finalizando este. trabajo nos
preguntamos :
¿Mintieron todos los cronistas españoles al atribuir
al Perú primitivo el conocimiento del Ser Supre–
mo, Dios?
¿Mienten irrualmente los dos cronistas indios so–
bre este punto?
o está a mi alcance dilucidarlo.
Pero i, como es natural, aceptamos que no mienten,
e e Dios supremo de los peruanos ¿no tuvo un nom–
bre? Si lo tuvo y no fué Wirakocha ¿cual fué ese