Table of Contents Table of Contents
Previous Page  327 / 554 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 327 / 554 Next Page
Page Background

el galardón que merecían, otorgando altas

menciones honoríficas a los ciudadanos que

se distinguieron por su amor a la democra–

cia y a la humanidad.

V

Tales son los hechos · que ofrece el ma–

terial documentario consultado y que se

conserva en bibliotecas públicas y priva·

das, sobre el cual intentaremos fundar un

juicio crítico, indispensable para explicar

esta evolución de las instituciones específi–

camente comunales. El criterio histórico, o

si se quiere sociológico, ha de formular los

principios generales que han regido la vida

municipal en las épocas cuya sumaria in–

trospección hemos realizado en los prece–

dentes capítulos. Desde luego, surge un as–

pecto esencial en todo ello: el pueblo pa–

oeño, fermento de hondas inquietudes an–

cestrales y de promisorias esperanzas exal–

tadas por su propia vocación, hizo del Ca–

bildo, primero, y de las municipalidades,

después, la institución básica para alcanzar.

las reivindicaciones sociales y políticas que

se propuso; a fin de descargar sobre la

vieja arquitectura colonial el golpe supre–

mo y el momento elegido, con este instru–

mento decisivo y eficaz. Por su parte, las

autoridades coloniales han estado oportu–

namente avisadas sobre la insurgencia del

nuevo espíritu comunal, pero si alguna vez

intentaron oponerle un atajo, el designio

resultó insuficiente y débil; porque se de–

jaron arrastrar

·a

la órbita de influencia y

sugestión del Cabildo, mostrándose incapa–

ces para limitar sus prerrogativas y pr·esti–

gio, firmemente' arraigados en la nueva

conciencia pública. El pueblo tenía que

buscar un medio para dar expansión a sus

ideales, traducir su impaciencia o servir sus

necesidades, y formó a su imagen y seme–

janza una entidad que así llegó a ser la

más genuina expresión de su turbulenta vo–

luntad. Por su parte, el Cabildo se compe–

netró de su misión, identificándose con los

anhelos populares, desenvolviéndose con

dignidad, entereza y acierto, aunque mu–

chas veces la prudencia le impuso el disi–

mulo, para no malograr el éxito de la cau–

sa que tenía entre manos.

El Título VII, Libro IV de la Recopila–

ción de Leyes de Indias, ha creado la ins–

titución del Cabildo en América, es decir

en cuanto atañe al régimen colonial, puesto

que las comunas existían de antiguo en el

continente; la organización era formalmente

r·ealista, pero su alma surgiÓ' genuinamente

americana, puesto que compartía la aten–

ción de las necesidades locales con el des–

arrollo del ideal emancipador.

No era posible exigir entre sus miembros

la unanimidad, pues ningún cuerpo cole–

giado la tiene: algunos eran monárquicos

tibios, otros exaltados, pero la mayoría de

los cabildantes nunca olvidaron que su con–

dición de americanos les s-eñalaba solamen–

te el camino de la independencia. Basta re–

cordar que el Estatuto Constitucional de la

revolución de julio fué promulgado por el

"Muy Ilustre Cabildo Gobernador-lnten–

d·ente, Justicia y Regimiento", en nombre

y representación del pueblo de La Paz.

Un estudio concienzudo de las actas ca–

pitulares del Cabildo Paceño ratificaría la

gran influencia que tuvo en el proceso de

la rebelión, pero infortunadamente no es

posible rehacer la historia completa de las

asambleas que ha celebrado, porque sólo

se conoce fragmentariamente y en dos par–

tes las actas capitulares: la primera en el

período del 20 de octubre de 1548, día de

la fundación de la ciudad, hasta el 6 de .

marzo de 1562, o sea catorce años de vida

e historia de la nueva población y la se–

gunda parte contiene las actas de las sesio–

nes del Cabildo paceño en los años 1824,

1825 y 1826, en que terminó el régimen

monárquico-colonial y advino la república; .

todo ello según documentos copiados del

Museo Británico de Londres, que al decir

de D. León M. Loza descifró D. Nicolás

Acosta, asesorado de Pascual Gallangos y

Clemente Markham, donde se conserva tan

importante documentación.

279