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paquete ·en . un grueso trozo d·e tela de saco
y
lo pone
a.
calentar sobre una plancha de cobr.e, encima de una estu–
filla -encendida. Durante media hora rocia con agua fría el -
paquete, lo da vueltas repetidas veces
y
no cesa de gol–
pearlo suavemente eon la palma de las_.manos. . _
. - t:a acción ·combinada del
ca~or-,
la humedad
y
la com–
pr-esión aglutina
y
~endureüe
los pelos,
·convirtiéndoJ.osen
un todo
_homog.~neo
y
consist·ente.
Al ·cabo de estos 30 minutos, la mitad del sombrero está
lista. La otra parte se prepara de la mis-ma manera.
Pero luego es preciso
unir~as.
Con este fin, el artesano
las dobla -·en dos, superponi:endo exactamente los ouatro
·bo_rdes respectivos; introduce la.S partes en la tela
y
el saco, ,
vuelve a coloearlas sobre la plancha ·cali-ente
y
las une por
medio· de las mismas operaciones d-e hum·edectmiento y plan–
chado.
HoTa y media de trabajo produeen
~omo
resultado una
bolsa de fi-eltro. Es ·preeiso, luego, darle forma de sombrero.
He ·aquí c6mo se hace:
· ~
El indio hi-erv-e residuos de chicli·a hecha con maíz ger–
minado; en seguida _eoge una almohadilla de lana, la em–
papa -en -el ·líquido caliente ·e impregna poco· a poco el fiel–
tro; lo enrolla en un palo
y
lo aprieta· largo rato con las
.manos. De esté modo, hasta ·el último peda:.zo del sombr.ero
queda empapado en el líquido tibio aún.
· En seguida coloca el fieltro sobre una cabeza de madera
de tamaño mediano
y
durante diez minutos lo soba hasta
dejarlo bi-en parejo; después de esto levanta / el ala, corta
el borde
y
deja secar el sombrero ·en la pi€za durante todo
un día.
Al día siguiente, lo
repa~a
con una piedra· pómez para
cQrtarlé todos los pelos que ·erizan la superficie. Terminada
esta operación, coloca ®bre ·el fuego una olla con un litro
de agua, maíz molido
y
goma natural; _la cantidad depende
de la rigidez que se desee obtén:er.
' Cuando estos 'ingredi-entes se han derretido
y
a~alga
mad:o, el sombrereTo empapa con ellos .su obra con__una al–
mohadilla de tela, frotando vigorosamente _durante unos
quinee minutos,
y
luego la deja al sol durante un día entero.
Ya no queda sino dar al sombrero el color des:eado. En
una caja metáliea veo maíz, _grasa, carbón pulverizado
y
tierra roja:
s~on
Jos elenientos empleados para dar al fieltro
uri color rojizo. · El fabricante los agita
y
une cuidadosa-
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