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chañar'' es un hongo que crece parásito al pie de dicho árbol, el que
e¡
preferido por las maravillosas (
?)
virtudes que comunica a las
hierbas y cosas que están bajo la influencia de -su atmósfera.
También se preconizan los "baños calientes de carqueja (Bac–
eharis. articulata)" y de "yerbabuena (Mentha rotundifolia) ". La
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~carqueja''
qu-e pertenece a la familia de las compositáceas, contie–
ne ácido crisosapónico, saponina y absintina. Por su parte, la ' ' yer-
babuena ", como la mayor parte de la labiaceas, contiene principios
aromáticos de muy probada fama.
El ''sobreparto'' también se cura dando a beber ''agua de raíz
de
1·etama (Cesalpine
n"
o "vino
h~rvido
con romero (Rosmarinus
officinalis) ' ' y ''alhucema del campo (Gomphrena poiretiana) ''.
Cuando, durante la expulsión de los "restos" o "paries", sobre–
vienen dolores agudos e irresistibles se ' ' quemá y muele bien la cás–
cara o piel de la gallina, cuidando que no sea negra; se mezcla este
polvo con la cáscara del granado (Púnica granatum) quemada y
pulverizada
y
con ese polvo se hace un té que se endulza con miel
o azúcar quem a '.
Para ' ' ech r s restos''
botella'' o ' ' arl
ayuden a largrar ............
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trés
plurnas
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m.ismo para ' ' ap
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principio
forma de insi ti
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se refiere al an·
a;
d que rroviene la pluma, que por su ligereza
tiene acción simpática sobre la inercia uterina.
Tanto para el ''parto'' o la expulsión de la placenta, cuando
.ambos tropiezan con dificultades diversas, se somete a la enferma a
ta
maniobra del "manteo" que consiste en "hacer cabalgar a la par–
turienta" sobre una sábana o "manta", moviéndola de arriba a
abajo
y
de derecha a izquierda para que se mueva el feto o se excite
la
musculatura uterina. Esta maniobra sólo puede ser realizada,
aparte de la comadrona, por los familiares de la enferma.
Por último, suele prescribirse la siguiente ''medicina'' para el
4:'
sobreparto"
y
enfermedades semejantes : "se toman tres medidas·
con hilo colorado, una desde la corona de la enferma hasta la punta
del
pie; otra, a lo largo de los brazos ·abiertos en cruz
y,
por fin,
rma
última, desde la corona hasta la cola. Luego, se hacen hervir
estos hilos conjuntamente con un trozo de acero, una moneda boli–
viana de 0,20 ctvs.
y
un terrón de la corona del horno,
y
de esa agua