FOLKLORE Y APUNTES PARA LA SOCIOLOGIA INDIGENA
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por el coneierto
entre las Naciones:
la Obina tiene
sus relaciones
a manera .de un eslabón, ora por las inmigraciones, ora por las refac10-
nes económicas, etc.; si bien el Perú no queda directamente afectado pue–
<1e ser indirectamente por Inglaterra; pafs con el que tenemos
relacione~
comerciales. Igualmente por un movimiento reflejo afecta
~
nuestra vida
t~divMnal
la suerte del Perú. De otr<J la<lo si está desarrollado nuestro
dentimient-o humanitario, quedaremos afecta<los por el derrame de sang1·e.
Este ·enlazamiento, es, pues, a
la manera de los circubs c-oncéntricos
producidos en el agua con la caída de un peso, que se transmiten como
<lerivativo de una causa universal. Si esto es asf, es evideinte la influen·
cia de las superscherfas, las creencias y costumbres inrlígcnas como un
acto reflejo en el proceso social de la Nación. Asi tenemos la super·
cheria del "ojo" (creencia extendida en la Sierra del Norte, del Centro,
en Arequipa, etc., oonsiste en que la clase media y gente bien no permiten,
las madres, que persona extraña mire fijamente a su criatura de meses,
porque creen que
sus hijos morirían
enteca<los a causa <le la ojería).
También existe esta creencia en las demás ciudades y pueblos de la Región
del Sur, como es de verse en los diversos informes presentados por los
Médicos Titulare y publicados en el "Registro Oficial <le 'Fomento", años
1916
y
19lfl.
Por lo mismo influye en el fenómeno sanitario, demográfico
y en general en e
pr ogreso del país. Por consiguiente es de aplicación
a nuestro estudio 1
t eoría de Turgot, pero no en su exclusivismo.
Augus·to
domte
es
consid.era<lo
como
el
padre
de la Sociolo·
gfa
por su
célebre
clasificación de las ciencias.
Para estudiar la So·
cieda<l, estaiblece una ley universal de tres estados: teológico, metafísico
y positivo, Figulendo el mismo criterio de Vico del divino, heroico y bu·
mano; y dice que una socleda.d ha pasa<lo siempre por _los tres estados,
llegando a constituir el segundo esta<lo la contlnuaci.ón del primero, del
mismo modo el
tercero es la continuación del segundo. Dice que para
estudiar la sociedad no sólo ha de analizarse en el proceso de -relación,
sino que es menester
estudiar
su naturaleza
intríns1ca.
Al deter·
minar el objeto de la sociedad, dice: que ni la Historia ni la Filoso!!a
puéde examinar, porque la primera explicará las causas de los hechos pa·
• ados; la segunda las leyes más generales de la vida
y
de la sociedad;
ta mpoco la Filosofía de la Historia como quiw Vico, porque ésta es tu·
dlará la naturaleza y
los fenómenos de los tiempos idos, pero no dará
una expli cación de los presentes. Nosotros ooncordamos con este concep–
to. A medida que crecen los conodmientos, surge la necesidad de una dl·
slón más especifica
de las ciencias, por un sistema metodológico y
por una ma or división del trabajo; luego, por hacerse rn ás complejo el
estud io, surgen nuevas ciencias
y
para es te grupo una filosofía parti cu ·
lar.
sí vemos que a medida de que las tradiciones, costumbres, mitos
•