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AMtiRICA Y BABILONIA
cada uno de los medíos de indagación
pu~stos
a nuestro alcance des–
arrolla su acción en una zona definida. Hemos llegado con las ciencias
naturales hasta los tiempos netamente paleoetnológicos. La arqueología
y
ciencias auxílíares nos han iluminado la prehistoria
y
protohistoria.
Por fin la lingüística nos ha prestado buenos servicios para discernir
la cultura de los pueblos romances (3 7) e identificar las dependencias
entre algunas lenguas indo-europeas
y
las anarias.
Más allá, encontramos el trinomio
afVa, sus, anshu,
es decir, tres
provincias independientes de creación intelectual. Este es el
terminas ad
quem
de la indagación filológica, e intentar de trasponerlo sería estul–
ticia.
biblioteca
nacional
del perú
(3 7)
Ver las etimologías de los nombres comunes del burro, en
la
p ág.
1O5.