SEÑOR. FRANCISCO -BURGES
151
dinario los modernos, desde Leclerc (pá–
gina
484,
núm.
1850:
Suppl.
i.
0
,
pág.
90,
núms.
2972-73)
hasta Hiersemann
(IS:ata–
log
346,
pág.
80,
núm.
822).
Pero están por
el P. Diego de Torres Bollo, no solamente
Alegambe (pág.
95),
Nicolás Antonio
(1
1
319)
y Sotuelo (pág.
177),
sino también
Backer
(rn, n55-5 6),
Torres Saldamando
(pág.
l
17)
y Sommervogel (vm,
J32-134),
con quienes no podemos menos de conve–
nir por una razón tan sencilla como conclu–
yente.
La
Relatirme breve
consta de su misma
portada que tiene por autor al «Procuratore
della Prouincia del Peru», que la firma «In
Roma alli
25.
di Febraio del
1603».
Ahora
bien: el que á esa fecha estaba de Procu–
rador del Perú en Roma era precisamente,
como lo hicimos notar en el núm.
958,
el
P. Diego de Torres Bollo, que, nombrado
al efecto en la Congregación provincial
celebrada en Lima por Diciembre de
i
600,
se puso luego en camino, arregló con gran
acierto los negocios de su Provincia en las
cortes de Roma y España, y llegó feliz–
meate de vuelta á Lima por Noviembre
de i694. En cambio, el P. Diego de Torres
Rubio ni
fué
nunca Procurador de la Pro–
vincia del Perú, ni aun salió de América ,
según advertimos en el mismo número,
desde el año de
J
5
77,
en que llegó á las
Misiones, hasta
su muerte, ocurrida el
viernes
23
de Abril de
1638
en el Colegio
de la Plata, ósea Chuquisaca.
Sabido es también, ó debe serlo, que en
las historias contemporáneas, y aun en los
mismos papeles y firmas· originales de un o
y
otro, el
P.
Torres Rubio aparece siempre
con sus dos apellidos, así co:no el P. Torres
Bollo con el nombre de Diego de Torres
sin más aditamento, salvo algún caso muy
r~ro
y de amistosa correspondencia, en que,
para mayor distinción, se le juntaba el de
Villalpando, de donde era natural.
S5
36.-Sendtschreiben Auss den weit–
berhümpten Landschafften China, Japon
vñ India, dess sechs vnnd achtzigisten,
vnnd siben vnd achtzigisten Jahrs. Sampt
Angehenckter erzehlung eines merckli–
chen Schiffbruchs, wie in andern schrei–
ben dess P. Petri Martonez anden Ehr–
würdigen P. General der Societet Iesv
den 9. Decembris, Anno
l
586. gethan,
vermeldet wirdt. Getruckt zu Dilingen,
durch Johannem Mayer, M. D. LXXXIX.
-En
l 2.º,
de
z
l l
ps ., s. varias hs. p. n.
cLe P.
Martonez
est le P. Pierre
Mar–
tinez
ou
Martins»,
dice Sommervogel
(D. col. 898), sin tocar la cuestión de que
se ha tratado en
«Raggvaglio d'alcvne
Missi"oni....
»
en el núm. 5533, á que nos
remitimos,
y
donde mostramos que el
autor original de este escrito es el P. Pe–
dro Martins, portugués, y no el P. Pedro
Martínez, español,
d~
Ródenas, como su–
pone Backer (n,
l I
17; m, 2336).
5537.-Señor. El Padre Francisco de
Figueroa de la Compañia de Iesus, Pro–
curador de las Indias dize: Que fray Pedro
de Sosa, de la orden de san Francisco,
llego al Reyno de Chile co otros frayles
de su religion, acosta de V. M. por el
tiempo que el
P.
Luis de Valdiuia de la
Compañia boluio a el con los medios y
ordenes que para la pacificacion de aquel
Reyno V. M. fue serl;lido de le encomen–
dar, por la mucha experiencia y trato
que auia tenido con los Indios de Chi–
le .....- En fol. º, de
z
hs. (De 1617.)
Véase
«Se1ío1'. Frauásco de Fig ueroa.. ..
»,
en el núm.
5
539 .
5538.-Señor. Francisco Burges , de la
ComP.añia de Jesus, y su Procurador
General de la Provincia del Paraguay
(cuyos Religiosos, por orden de V. Mag.
y de sus Progenitores los Reyes Catholi–
cos, doctrinan los Indios de las Reduccio ·
nes de el Parana, y Uruguay, que son