CapítuJo XXI.
73
sado grande alboroto ..en todo el reyno, y que debia
prudentemente haberse en la ejecucion dellas;
y
oÚas
cosas de las que habian pasado.
E~tas
pláticas pa$aron
aquella noche el visorey y el obispo, habiendo tambien
hablado otras personas con V
~ca
de Castro y ·con .los
.más
caballero~
que
~llí
estaban.
'
Lorenzo Estopiñan habia salido á recibir al visorey,
,
y viendo en él voluntad
pa~a
no ejecutar las leye$ hasta
· que los oidores viniesen, adelantóse á les dar la nueva,
y lo mismo hicieron otr·os; mas, aunque lo afirmaban,
no dejaba de haber gran tristeza en los ánimos de todos,
adevinando que habia de causar grandes males la en–
trada en Perú del visorey, y la guerra se habia de en–
cender de nuevo
y
habia de ser peor y más larga que
la pasada; porque se levantaba por causa más impor–
tante
y
pesada que.las otras
(a).
CAP.
XXI.-Cómo
el
visorrr Blasco
Núñe{
Vela entró
~n
la
'cibdad de Los Reyes.
L
~s
del cabildo de la cibdad, como con la venida del
visorey no se holgasen, ni les diese ningun con–
tento. lo que traia, no habian entendido en aderezar el
(a)
Faltan en las Dfradas estos sucesos,
á
contar de la parada en
el
Xagüey..