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metio
y
dió el Espíritu Santo, como
á
la tglesi'a universat,
re.
presentada por el concilio universal.
¿A
quien de los Apóstoles
o
de los Profetas, nominalmente se le dijo-Te
daré el espí·
i·itu de verdad, para que permanezca contigo eternamente?
Se
opundria aquello del
Salmi~ta.
Todo hl)mbre es mendaz-So·
lo á la Iglesia, que· eo; columna
y
base de la verdad, cierta.
mente se le ha dicho--
Yo rogaré por
ti
al Padre
y_
os dará
otro paracleto que permanezca con vosotros en eterno espiritu
de verdad,
ME parece,
m~
'voy deteniendo demasiad'l, en los que
solo deben ser unos prolegómenos--Opongo por último una
fuerza irresistible en la respuesta de Paulo
IV
sobre si podía
resolver el matrimonio
contraído por palabras de
presente
entre Francisco M.,morenci y Juana Halluyna.
Ne quaJ.m
vos
teneant decessorum meorum
f
acta et . exempla. quiz eatenus seqtti
volo, c¡uatenus secriptur<B autoritas, et theologorum rationes vos
ad illud agetidum inducent. Non dubito quin ego, et desseso·
Tes mei, errare alicurando potruerimus, non solum ·irt hoc, sed
etiam in pluribus aliis 1·erum generibus.
SEXTO Jeronimo Alano en el tratado de la ¡i>¡Otestad del
Papa (.) 1iuis
co c ·ar las opiniones: decia.
El
Papa er–
rando en lo que n) e
de
re,
no puede ¡¡er juzgado por el
concilio, c 1mo in
··
l'
Ni se estienda
á
no poder ser juzgado
en ca8o de h
·éiia-
Gum enin Pontijex hereticus extra eccle–
siam sit, P9
t
·
eJJ
ese desit et pontificiam potest tem ªmittit.
I:.e
preguntaría
j,Y
entonces en quien queda la potestad
?
en un
cuerpo superior, que representa
á
la Iglesia,
y
que 1amas pue-
de faltar ni errar.
,
.
SE remontan las pruebas hasta el concilio de Calcedo–
nia, tenido en el año de
451
es por esto, que dijo el Car–
denal de Cusa, que en
los concilios jenerales el Papa
con~.
curre al primero, pero que su autoridad se valoriza por
el
consentimiento de los otros, que celebran el concilio; que la
fuerza de
las decisiones, no viene del Soberano Pontífice, si·
no que. depende del consentimiento de todos; del suyo y del
de los otros.
Esto lo reconocio S. Leon en su carta á los
padres del concilio de Calcedonia.
"A fin dice: que la asam–
b
ea de hermanos y todos los fieles conozcan que estoy uni·
do con vosotros en sentimientos, no solo por los legados, que
han tomado mi lugar, si tambien por la aprobacion que dais
r.]
la.
pte, n.
126.
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