63 / 214
57
forma
Dei
essPt,
·non rapinam
arbitratus
est
essP.
st:i
<13qúalem
De(>.
E l texto de S. Juan,
fué
la base del arrianismo. (.) Pero el
mismo Señoi· elijo: ••mi padre
y yri
somos uno.» Con lo que
los padres contestaron
á
Arrío. Esta divinrdad la predico S.
Juan en el principio de su evanjelio1 (,) Notemos, que la es·
plicacion de esos textos, para reprimir la herejía, si comenzó
en los padres
1
!le ratificó en los concilios.
EL que en naciendo nahia anunciado la paz
á
los hom·
bres; (;) el que saludaba
a
sus discípulos: la paz sea con vo–
sotros; (:) el que habia dirho, que en amarse mutuamente
1
se
conoce ria, que
!e
correspondinn; ( ') este mismo Señor afir'–
mó, que no se creyese, que traía la paz, sino la guerra,
y
que quería, que el mundo se incendiase.
L"]
Algo mas exije-.
Los que quieran numerarse entre sus discipulos aborreZcQn
i1.
su padre, madre, hermano&, todas rPlaciones
y
In
'lue es mas
á
su alma misma.
Estos son
ind1spen~ab
1
es
medins para la
salvacion.
(*)
¿Y como convenirse eso cuando hahia enseñado
que el amol' al prójimo, como
a
sí mismo, era un precepto
semejante al primero
y
muximó de amar
á
Dios su
~·~ño1·
'Con
todo el cnra on, o<la la alma
y
en toda la mente?
~t)
tlncehd iar
la tierra, el
~11
)'
ren<
ÍQ
a sus discípulos, cuao<lo intentaron
se les consin ie"
ha
r que baja e fuego riel cielo para con•
sumir la villa, que
o había querido
re~ibirle,
cficiendolés, que
Sil
espíritu no •r
e ae
lías,
(§)
el que
se.
puso por
ffiU"'
delo de humílQad
y
mansedumbre,
(11]
el que no apagó el can–
dil, que aun humeaba, ni acabó de quebrar la caña rnjada1
.Dejad estos textos
á
discrecion
y
se multiphcaran los lifl>ros
del
citador
y
del buen st:ntido.
N
VESTKA
Iglesia es
tina, santa, cntolica, apostólica
Si
estos son sus atributos e enciales, es preciso, que en ella es–
&é
el depósito
y a
él ocurran los cristianos en sus
perpleji~