Previous Page  391 / 462 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 391 / 462 Next Page
Page Background

374

INQUISICIÓN DE CHILE

«El español vió el cielo abierto con esta ocasión

por verse libre de aquel infelicísimo cautiverio

entre luteranos

y

enemigos de la fé. Llegó á los

dos españoles, díjoles quién era y á qué venfa; lle–

váronle á donde estaba el Corregidor

y

la gente de

Santiago, que aún no habían llegado al puerto de

Quintero, los cuales supieron de este español cómo

venían tres navíos y una lancha de ingleses y por

general Tomás Cándish, y que al pasar por el

Estrecho le habían cautivado y que era de los sol–

dados que habían Yenido allí

á

poblar, los cuales

con la hambre y frío se habían acabado y sólo que–

daban veinte. Marchó la gente con este aviso más

á la ligera,

y

llegados al puel'to de Quintero, reco–

nocieron que el enemigo, impaciente de esperar la

respuesta y apretado de la necesidad de agua y

leña, había vuelto á echar alguna gen te en tierra,

y avisados de que hácia una quebrada andaban

quince, salieron

á

ellos de repente

y

cercándolos

por todas partes los cogieron, matando cinco y

aprisionando nueve.

Y

aunque de las naves dispa–

raban la artillería y de la playa la mosquetería los

que estaban de mampuesto, nuestra caballería es–

pañola siguió el alcance con gran furia y los hizo

embarcar tan á prisa que á no darse tan buena

maña y tener tan á punto las barras, lo pasúran

peor

y

hubieran dejado más.»2o

«Si no fuerrt por la ligereza con que se acogieron

á un peuón metido en el agua, añade un antiguo

cronista, donde no llegaban los nuestros, por los

20 Rosales,

Ifist. de Chile,

II,

pá.g.

213.