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EN LAS ISLAS FILU'INAS
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anterioridad al dei P. Santa Cruz) pero cuya denun–
ciación tuvo lugar mucho más tarde. En efeCto, en
4 de Julio de 1772, el agustino Fr. Juan Eusebio Polo,
dirigía al Tribunal de México la carta siguiente:
«<llmos. SS. Inquisidores de la santa Inquisición
de México.-Obedeciendo, señores, como cató'lico,
cristiano y verdadero hijo de mi padre San Agustín
á las eonstitucio-nes apostólicas citadas en el edicto
de la santa General Inquisición de Esparia, que pro–
hiben, aún en escrit•)S y pláticas privadas, afirmar
la concepción de la Virgen María en pecado origi–
nal, me veo obligado por dichas apostólicas consti–
tuciones y edicto general, á escribir ésta
á
V. S. Ilus–
trísima.· No he presentado esta n'li delación á el
M. R. S. comisario de esta santa Inquisición que
reside en la ciudad de ManÜa, por motivos muy gra–
ves que en las presentes cii·cunsta.ncias me asisten.
El M. R . P. Fr.
l'
ranci~co
de San José, del sagrado
orden ele predicadores, fué uno de los más celosos
ministros que con su doctrina y vida exemplar
alumbró á tod_as éstas provincias de indios tagalos
por fines del siglo XVI, y
despuéstambién fué el
Demóstenes de e ta lengua taga.Ja, y nos dejó mu–
cho · libros impresos y manuscritos llenos de piedad
y
erudición, mas, como dicen,
aliquanclo bonus dor–
mitat l-fomeras.
Vu estras Seüorias Ilu strísimas ve–
rán por el pliego adjunto, las doctrinas que deltito
á
ese santo Tribunal, al cual quise escribir aparte por–
que si Vuestras Sefiorías remitiesen á Manila esta
mi delación, no sea conocida mi .firma y las de los
RR. PP. ele mi religión que certifican el pliego, y así
excusar aún los remotos peligros ele sentimiento
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